ALICANTE. El Ayuntamiento de Alicante llama a la puerta de la Conselleria de Cultura para cofinanciar un nuevo proyecto de restauración parcial en la fachada del edificio consistorial. El equipo de gobierno, del Partido Popular (PP), ha aprobado este viernes, en el transcurso de una reunión extraordinaria de la Junta Local, el acuerdo de solicitud de fondos que permitan costear la reparación de las dos torres del inmueble, después de que el desprendimiento de un fragmento de cornisa de la torre del reloj, en octubre de 2024, permitiese confirmar su estado de deterioro.
En concreto, la petición municipal se encuadra en el programa de ayudas del Plan Restaura, destinado a cofinanciar "actuaciones de conservación, mantenimiento, restauración y rehabilitación de bienes inmuebles integrantes del Patrimonio Cultural" de la Comunitat Valenciana; una circunstancia que concurre en el caso del edificio en el que se ubica el Ayuntamiento, reconocido además como Bien de Interés Cultural (BIC).
De ahí que los populares pretendan aprovechar esa ventana para obtener parte de la financiación requerida que permita ejecutar el proyecto de restauración de esos dos elementos, en una actuación de "reparación y consolidación" que se habría valorado en más de 468.000 euros (468.430,37 euros, impuestos incluidos). Eso sí, en todo caso, la convocatoria permite obtener un máximo de hasta 200.000 euros.
Ese proyecto sobre el inmueble histórico se suma a la reparación de emergencia que se ejecutó después de que se produjese la caída de cascotes de la cornisa sobre la vía pública, hace once meses. Entonces, se sanearon los elementos constructivos de las dos torres y se instalaron redes de protección para evitar nuevos desprendimientos que pudiesen conllevar riesgo para los viandantes que pudiesen discurrir por las inmediaciones del edificio.
Ahora, cerca de un año después, se ponen en marcha los trámites para ejecutar una segunda intervención que permita reparar las dos torres, a la espera de que pueda llevarse a cabo el proyecto de rehabilitación integral de todo el edificio, a partir del proyecto que se redactó tras el contrato suscrito en 2022.
Dicho proyecto volvió a emerger en el debate público tras el incidente del desprendimiento, cuando trascendió que se seguían manteniendo reuniones periódicas de coordinación entre los técnicos municipales y los de la Conselleria de Cultura para ajustar el proyecto, antes de que pudiese darse el visto bueno definitivo a la propuesta. De hecho, esas reuniones conllevaron la introducción de modificaciones el pasado diciembre. Sin embargo, hasta el momento, no se ha dado a conocer el estado actual de la tramitación de ese permiso que debe conceder el departamento autonómico, ni el importe definitivo que supondrá la ejecución de las obras.