ALICANTE. Nueva etapa a la vista para la Plaza de Toros de Alicante. Aunque, en principio, más breve de lo que se auguraba. El equipo de gobierno, del Partido Popular (PP), aprobó este martes en la reunión semanal de la Junta Local la convocatoria del concurso (un contrato de arrendamiento, según la propuesta de acuerdo) para conceder la explotación del edificio, de propiedad municipal, en régimen de concesión, ante el próximo vencimiento del contrato actual, en manos de Eventos Mare Nostrum. Ese vencimiento se producirá el próximo mes de abril, cuando se agotará la última prórroga sobre la prestación del servicio que se aprobó en 2023 para compensar el tiempo en el que permaneció cerrada y sin actividad, con motivo de las restricciones que se aplicaron tras la irrupción de la pandemia de la covid. Ese contrato tenía una duración total de cuatro años. Ahora, en contra de todas las expectativas, la nueva licitación parte con una duración de solo uno.
¿Qué habría motivado la apuesta por concertar su gestión a tan corto plazo? Todo parece indicar que esa duración limitada respondería a la intención de poner en marcha el proyecto de rehabilitación integral del edificio que viene barajándose desde el pasado mandato y que habría cobrado nuevo impulso ahora, en el marco del proyecto 'Alicante Nuevo Centro' anunciado durante el debate sobre el estado de la ciudad, con la intención de potenciar un eje cultural entre el Adda, un nuevo museo de carácter internacional que quedaría emplazado en el complejo de Las Cigarreras, y el propio coso taurino, que se pretende remodelar y acondicionar para potenciarlo como espacio para la celebración de eventos musicales y culturales para citas con un máximo de 11.000 espectadores (el aforo del que dispone, según fuentes municipales). En principio, se barajó que esa remodelación promovería la cobertura del edificio, con un sistema retráctil que permitiese su retirada. No obstante, esa posibilidad habría quedado ahora, sino descartada, sometida a revisión para mejor estudio, según fuentes consultadas.
Por lo pronto, esa es la hipótesis más plausible que contempló el propio vicealcalde y coportavoz del equipo de gobierno, Manuel Villar, al dar cuenta del acuerdo de convocatoria del concurso. "La propuesta de un año de duración es una decisión de la Concejalía de Plaza de Toros y sí, ese [la reforma] podría ser uno los motivos", apuntó. Sea como fuere, los tiempos de ese nuevo contrato conllevarían que se haya descartado la posibilidad de vincular la explotación de la Plaza con la ejecución de la reforma, bajo la fórmula de concesión a cambio de obra. Esa posibilidad quedaría aplazada, en todo caso, hasta un próximo concurso más allá de mediados de 2027, cuando finalizará el nuevo contrato de explotación que se pretende concertar ahora.
Rentas de 293.000 euros
¿Cuáles son el resto de condiciones del concurso, al margen de su duración? A la espera de que se publiquen las bases de la licitación, la propuesta de acuerdo avalada por el equipo de gobierno solo precisa que el futuro concesionario deberá abonar un canon equivalente a un porcentaje de participación sobre los ingresos brutos de taquilla, IVA excluido, "de cada espectáculo taurino que se celebre (obligatorios y opcionales)", además de "unas cantidades fijas por la celebración de cada espectáculo no taurino que se promueva en la plaza", como los distintos ciclos de conciertos que se han desarrollado en los últimos años, o la celebración de otro tipo de eventos de carácter gastronómico, por ejemplo.
Por último, también se apunta que deberá abonar "un porcentaje de participación sobre los ingresos brutos de taquilla, IVA excluido, del programa de visitas a la plaza y al museo taurino": otro de los revulsivos incorporados por Eventos Mare Nostrum, a partir del acuerdo suscrito con ToroShopping para ofertar un tour guiado que incorpora realidad virtual. Se trata, en consecuencia de parámetros similares a los contemplados en el contrato precedente, sin que haya trascendido todavía la cuantía de esos porcentajes. Por lo pronto, el acuerdo comprende que ese canon debería alcanzar un importe mínimo de 293.715,23 (impuestos incluidos).
En la licitación precedente, Eventos Mare Nostrum se convirtió en adjudicataria de la explotación del coso en 2020 después de presentar la única oferta registrada en el proceso. Entonces, ofertó abonar al Ayuntamiento el 6% de los ingresos obtenidos en taquilla por la celebración de espectáculos taurinos. A ello se añadía un fijo de 5.000 euros por cada espectáculo musical o de variedades que se organizasen en el coso; otros 3.500 euros fijos por otro tipo de espectáculos no musicales ni taurinos; y otros 2.500 euros por aquellos espectáculos en los que solo se utilizase el ruedo.