ALICANTE. El operador estatal Aena avanza en el proceso para impulsar la ampliación del aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández, en la pedanía ilicitana de El Altet, con la fase final de la criba para adjudicar la redacción de su proyecto. Ese concurso, convocado en enero de este año por un importe de 19,8 millones, queda encauzado con tres últimos equipos redactores todavía en liza, frente a los siete que se registraron al cierre de plazo de presentación de ofertas, con la particularidad de que ya se habría producido la valoración de sus propuestas técnicas y que, además, también se ha podido conocer sus respectivas ofertas económicas.

En principio, la alternativa que quedaría situada en una posición aventajada sería la presentada por una alianza internacional de estudios de arquitectura compuesta por la francesa JFS Architectes, la italiana One Works Spa y la española Viarium Ingeniería. Cuando menos, su planteamiento es el que habría sumado una mayor puntuación en el análisis de la alternativa técnica, hasta alcanzar los 89,25 puntos. Y, al tiempo, es la que también habría ofertado el menor precio de los tres concurrentes todavía vivos, por un importe neto de 11.705.700 euros.

Las otras dos alianzas competidoras plantean un precio superior y cuentan con puntuaciones técnicas inferiores. En concreto, la alternativa formada por los españoles Cemosa, Fairbanks Arquitectos y Sener Mobility propone un importe de 12.922.018 euros y suma la segunda mayor puntuación: 87,82. Y la propuesta registrada por Prointec, Francisco Benítez Arquitectos e Incosa (los tres, también nacionales) se eleva hasta los 12.903.864 euros, con una puntuación técnica de 83,29.

Eso sí, todavía no se habría elevado una propuesta de adjudicación concreta por lo que el proceso no puede darse por cerrado, a falta de que se produzcan las evaluaciones y comprobaciones definitivas. En cualquier caso, todo parece indicar que la resolución del concurso podría producirse a corto plazo, lo que despejaría el camino para que pueda abordarse el diseño arquitectónico del conjunto de actuaciones previstas en ese proyecto. Entre ellas, la principal consiste en el derribo de la antigua T-1, ahora en desuso, y el del edificio (de menor tamaño) de la terminal de Aviación General, para que se pueda construir un nuevo dique como prolongación de la T-2 en paralelo a la pista de operaciones.

Más puertas de embarque

Ese nuevo dique incorporará puertas de embarque adicionales (todavía, en número por concretar) que estarán asistidas por pasarelas para facilitar el tránsito de los viajeros hasta las aeronaves de forma cómoda. Y, además, permitirá habilitar un nuevo puesto de control fronterizo centralizado para organizar el tráfico procedente de países de fuera del espacio Schengen: los que quedan fuera del marco del espacio de seguridad de la Unión Europea, como el Reino Unido, que constituye el origen de la mayor parte del tráfico en el aeródromo provincial. De hecho, esa futura prolongación de la terminal quedará reservada de forma exclusiva a organizar ese tráfico con el fin de mejorar el procesamiento de los viajeros de procedencia británica. De hecho, en ese espacio se prevé habilitar una nueva zona comercial y de restauración, además de una sala VIP propia.

En concreto, el proyecto de ampliación se habría concebido con la intención de que el aeródromo gane capacidad operativa, de modo que pueda absorber al menos hasta 26 millones de pasajeros anuales, según las primeras estimaciones barajadas hasta ahora. No obstante, los cálculos finales no se conocerán hasta que se disponga de los proyectos definitivos. De hecho, la ampliación del Miguel Hernández contemplada en el denominado DORA III para el periodo 2027-2031 incluye un paquete de actuaciones más amplio, no limitado a la construcción del nuevo dique, que abarca la mejora de los aparcamientos, viales y otros elementos de la urbanización, así como mejoras en las calles de rodaje en plataforma que reducirán los tiempos de tránsito de las aeronaves y la construcción de una calle de salida rápida para conseguir la misma operatividad desde ambas cabeceras de pista, según precisaron fuentes de Aena durante la presentación del DORA III. Con ese paquete de actuaciones, se prevé que la superficie actual del terminal se incremente en casi un 30%.

Según las previsiones de ese documento de ordenación, la realización del conjunto de esas actuaciones podría alcanzar un desembolso de 1.154 millones. Por lo pronto, Aena también ha anunciado ya el reinicio del concurso para la contratación de las asistencias técnicas de planificación y supervisión de las obras de ampliación de la terminal, para las que ya se ha estipulado un presupuesto de 38 millones.