El control de accesos habilitado en la calle Castaños durante la celebración de la 'tardevieja' de 2020. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. Vuelta al 31 de diciembre en pleno mes de mayo. Y no por una hipotética celebración, sino para garantizar el cumplimiento de las medidas de prevención de contagios por coronavirus. El Ayuntamiento de Alicante prevé recuperar el sistema de control de accesos y conteo de aforo en las principales zonas de ocio de la ciudad, como la zona Centro y la Playa de San Juan, con el fin de evitar aglomeraciones durante el primer fin de semana completo en el que ya no regirá el cierre perimetral aplicado sobre el territorio autonómico que ha permanecido vigente desde el pasado enero.
Así lo confimaron este miércoles fuentes de la Concejalía de Seguridad que coordina el edil José Ramón González (PP), quienes incidieron en que se cuenta con la experiencia desarrollada durante los controles que se desplegaron durante la pasada Nochevieja (en realidad, reconvertida en tardevieja) que se reeditarán ahora, ante la previsión de que pueda producirse un numeroso desplazamiento de turistas nacionales en estancias de fin de semana o a visitar sus segundas residencias en la ciudad.
Además, añadieron que ya en la madrugada del pasado domingo (el momento en el que decayó la declaración del estado de alarma) comenzaron a reforzarse los controles para garantizar el respeto de los porcentajes de aforo en los locales de los establecimientos de hostelería. En ese primera prueba tras el fin del estado de alarma no se produjeron situaciones conflictivas que acarreasen aglomeraciones de público.
De este modo, las mismas fuentes detallaron que, en este próximo fin de semana, se retomará la instalación de vallas con puntos de control por parte de la Policía Local en los principales accesos a las calles del entorno de Castaños ,y que se acordarán cierres puntuales como los que se produjeron el 31 de diciembre en el supuesto de que se produzcan concentraciones de público no autorizadas. Se trata de una medida ya acordada con los propios empresarios hosteleros para procurar que el desarrollo de su actividad transcurra en condiciones de seguridad, sin riesgos de contagios.
Habrá puntos de control en el entorno de Castaños, en Playa de San Juan, en las calas y en los alrededores de los dos castillos
De igual modo, esos puntos de control se extenderán también a las calles del distrito de Playa de San Juan en los que se agrupan locales de ocio, como Países Escandinavos, o el entorno del campo de golf. Y también en la zona de la avenida de Pintor Xavier Soler, en las calas de la ciudad y en los alrededores del Castillo de Santa Bárbara y del Castillo de San Fernando. Todo, igualmente, con el objetivo de evitar la organización de botellones en esos puntos en los que no existe actividad hostelera.
En principio, el operativo podría contar con los refuerzos habituales que ya se movilizaron durante fechas especiales, como el día de Santa Faz, o el propio día de Nochevieja, en los que se contó con cerca de 150 agentes de Policía Local, más allá de la plantilla habitual de servicio. En todo caso, ese dispositivo dependerá también de las medidas que puedan coordinarse junto a la Generalitat y la Delegación del Gobierno para velar por el cumplimiento de las normas de prevención frente a la covid en encuentros como el que se preveía celebrar este mismo miércoles, a propuesta de la Conselleria de Justicia y Administraciones Públicas. Por lo pronto, eso sí, el alcalde, el popular Luis Barcala, ya reclamó que tanto la administración autonómica como la central puedan destinar medios para desarrollar esos controles, tras apuntar que hasta el momento no ha habido coordinación ni "ofrecimiento de medios".
Al término de ese encuentro, celebrado con los alcaldes de las ciudades del litoral, la titular de Administraciones Públicas, Gabriela Bravo, subrayó la importancia de convocar reuniones de las Juntas de Seguridad para planificar y detallar los puntos que podrían resultar más conflictivos y, así, poder arbitrar los dispositivos y los medios adecuados. De igual modo, apuntó que "la Generalitat ayudará a los ayuntamientos que lo necesiten", con los recursos de la Policía Autonómica, y anunció que también se contaría con el apoyo de la Policía Nacional y de la Guardia Civil. Eso sí, no se llegó a concretar qué número de agentes se podría dedicar a reforzar ese operativo de control para garantizar el comportamiento cívico "que se ha mantenido en la Comunitat hasta la fecha", según enfatizó.
