Alicante renueva el convenio por la recepción de residuos de la Vega Baja con subida de precio

ALICANTE. El Ayuntamiento de Alicante renueva el acuerdo de colaboración alcanzado con el consorcio comarcal de residuos de la Vega Baja, en el que se agrupan los 27 municipios de la comarca del sur de la provincia, por el que se regula la recepción de parte de sus desechos en la planta de tratamiento municipal de la partida de Fontcalent. El acuerdo -que se prevé aprobar este martes en Junta de Gobierno- es, en realidad, una actualización respecto al convenio que se validó en julio de 2023, en el que, además de ordenar las condiciones para la llegada de esos residuos hasta el año 2027, se fijaba el nuevo precio por tonelada establecido por el pago de ese servicio de tratamiento y eliminación respecto a los que se habían establecido en el convenio previo, de 2020. 

Con la renovación actual, se incorpora la actualización de esos costes por tonelada, después de que el consorcio comarcal de residuos haya incorporado la fórmula matemática establecida para su cálculo. Se trata de un trámite que no había quedado validado en el seno del consorcio hasta ahora, por lo que resulta necesaria la novación del convenio con las cifras que ya se habían preestablecido hace menos de un año. Así, el acuerdo delimita que Alicante recibirá una compensación de 69,54 euros por tonelada de residuo tratada, con un máximo anual de 69.250 toneladas. 

Con ello, Alicante se garantizaría ingresos extra que se estiman en la cifra de 4,1 millones anuales desde 2023 hasta 2027. Por lo demás, se mantienen el resto de condiciones establecidas en el convenio que sí quedó aprobado por el ayuntamiento de la capital en su integridad el pasado julio. Entre ellas, se incluye el compromiso de clasificación y compactado previo en la planta de transferencias de la que ya dispone el consorcio en el municipio de Dolores. Y también, el establecimiento de una graduación estacional con el fin de evitar la saturación de las instalaciones de Fontcalent. 

En concreto, en ese convenio se delimitan tres periodos (valle, media y punta) en función del volumen de residuos generados tradicionalmente por la población residente en Alicante. Así, se considera periodo valle las fechas comprendidas entre el 1 de enero y el 31 de marzo, y entre el 1 de octubre y el 31 de diciembre. En ese plazo, Alicante podrá recibir un máximo de 36.750 toneladas procedentes de los municipios de la Vega Baja, a razón de 1.470 toneladas semanales. En segundo lugar, se considera periodo medio las fechas encuadradas entre el 1 de abril y el 15 de mayo, y desde el 16 de agosto al 1 de octubre. En esa franja temporal, la planta de Fontcalent podrá recibir hasta 18.200 toneladas anuales (1.300 semanales). Y, por último, el periodo punta sería el delimitado entre el 16 de mayo y el 15 de agosto, al ser el momento del año en el que se multiplica la población residente en la ciudad. En esos meses, Alicante podrá recibir un límite de 14.300 toneladas (1.100 semanales).

Pendiente de planta propia

La ratificación del convenio con actualización de precios tanto por parte del Ayuntamiento como del consorcio comarcal ampara la continuidad en el traslado de desechos desde parte de los 27 municipios de la Vega Baja, en función de la resolución promovida por la entonces Conselleria de Transición Ecológica a partir de 2016. Esa disposición incluye también el reparto de residuos de esa misma comarca en las plantas de tratamiento de Villena, Xixona y Elche, a la espera de que el consorcio comarcal pueda disponer de un centro de tratamiento propio (pendiente desde que se produjo el estallido del caso Brugal y de las supuestas anomalías en su planificación y adjudicación).

En la actualidad ya se dispondría, como mínimo, de una propuesta de ubicación a partir del planteamiento formulado por PreZero: la empresa que lidera la UTE concesionaria del desarrollo del plan zonal de residuos de la comarca. En concreto, en esa propuesta se contempla la construcción de ese centro de tratamiento en la pedanía oriolana de Torremendo. Con todo, esa alternativa sigue sujeta a que los técnicos del consorcio analicen su viabilidad, según precisó el presidente del consorcio y alcalde de Formentera del Segura, Francisco Cano, a consulta de Alicante Plaza. Y a que puedan presentarse posibles alegaciones, ante el rechazo a esa posibilidad que ya ha anticipado el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Orihuela. Por lo pronto, Cano señaló que, si llegan a presentarse emplazamientos alternativos, también se someterán a estudio.