Porfirio Pascual en Carrús Este, donde se encuentra bloqueado el proyecto de reformaELCHE. Al equipo de gobierno se le han atragantado los últimos concursos públicos con distintos proyectos en materia tanto de servicios como de limpieza, como de actuaciones urbanísticas en Carrús o intervenciones en materia educativa o de otra índole. En poco tiempo, se han acumulado los concursos desiertos o con errores, lo que en algunos casos ha supuesto que se retrasen. En estos casos, supone tener que dejar en punto muerto varios proyectos en un año en el que ya hay planeadas licitaciones que van a sobrecargar al departamento de Contratación.
Las situaciones más llamativas son desde luego la suspensión de uno de los proyectos emblemáticos del bipartito para esta legislatura y ejercicio, la regeneración de Carrús Este. Como adelantó este medio, un recurso especial del Colegio de Arquitectos ha hecho que el Tribunal de Contratos atendiera a sus razones y haya suspendido cautelarmente el pliego de condiciones. Se abrió un proceso de alegaciones por si el Ayuntamiento quería presentarlas, aunque desde Urbanismo se ha declinado responder. En cualquier caso, se ha recurrido por motivos de competencias de quienes tienen que elaborar el proyecto, así como cuestiones de garantía y exigencias a los licitadores. El pliego ya tuvo que ser corregido en diciembre por falta de documentación.
Molí del RealNo es el único concurso paralizado, ha habido dos que han quedado desiertos. Uno de ellos es el del Molí del Real, como se informó en la última Junta de Gobierno de diciembre. Se trata de un actuación compleja porque supone tener que anclar el viejo inmueble —del que se ha advertido que es muy sensible a las vibraciones— a la ladera del río. Sería el primer paso para una rehabilitación integral. No obstante, el portavoz de la Junta, Héctor Díez, apuntaba en su momento que se va a esperar porque uno de los proyectos planteados para los fondos europeos Next Generation es el de un plan integral para el agua regenerada del palmeral en la ladera del Vinalopó, lo que pasaría por rehabilitar también el molino. Así que por el momento se va a esperar a ver si la actuación se acepta para incluir esa suerte de anclaje.
Por otra parte, aunque con una situación diferente, también quedó desierto el concurso para instalar paneles LED informativos en distintos puntos, entre ellos la pared del Gran Teatre, la fachada del Centro de Congresos y otro en la plaza de las Chimeneas. Se presentaron dos ofertas, pero la primera fuera de plazo; la segunda, invalidada al cometer la empresa el error de insertar la información del sobre B en el A. Se volverá a sacar a concurso con el propósito de que se vuelva a adjudicar porque se ha visto interés. En menor medida, también ha quedado desierto el contrato de alquiler de maquinaria sin conductor destinada al Departamento de Parques y Jardines.
Asimismo, otro de los errores detectados en un pliego importante ha sido en el del servicio de limpieza de las dependencias municipales y de varios centros educativos de la ciudad, cuyo contrato tiene un presupuesto de 3,1 millones de euros. El fin de presentación de ofertas no se ha modificado, pero sí se ha estirado el proceso al detectar fallos en el pliego. En este sentido, la apertura del sobre económico estaba prevista para el 17 de enero y ahora será el 2 de febrero. Lo que estirará el proceso.
En cuanto al concurso público para las obras del nuevo centro social de San Antón por 1,2 millones, se advirtió un error en la plantilla para presentar la oferta económica, además de que no se habían adjuntado diversos anexos sobre las instalaciones o gestión de residuos, entre otros aspectos. El resultado, otra licitación que se alarga, pasando el plazo de entrega de ofertas del 7 de diciembre al 22 de diciembre. Otro caso similar ha sido el de la adjudicación del contrato de servicio de prevención ajeno, ampliando el plazo de presentación de ofertas hasta el 13 de enero. Se llegó a anular el pliego el 17 de noviembre porque hubo que modificar documentación y cálculos realizados del pliego.
Por último, y de forma más reciente, en una Junta de Gobierno de mediados de enero, se aprobaba de nuevo corregir errores en pliegos de la licitación del contrato para la redacción y dirección de obras de las seis aulas del Rodolfo Tomás Samper —proyecto Edificant— por criterios de adjudicación y de la redacción del Plan Rector de Uso de la red de riego del palmeral. Eso sí, en ambos casos sin que ello supusiera atrasar la presentación de ofertas y por tanto los proyectos.
Una situación en la que se han acumulado bastantes suspensiones o corrección de errores en poco tiempo, y que fuentes municipales reconocen que puede ser debido a la carga de trabajo del departamento de Contratación a la hora de elaborar los pliegos. Son muchos los proyectos que se quieren abordar con los presupuestos de 2022, pero antes hay que dar salida a los que quedan pendientes de tramitar de 2021. Y ello sin contar en los que se está trabajando de los fondos europeos, por lo que la sobrecarga de este ejercicio va a ser importante. En la pasada legislatura ya se generó un cuello de botella que obligó a reforzar el departamento.
