ALICANTE. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha agravado la pena a la alta funcionaria de la Agencia Tributaria condenada por su implicación en una red que se apropió de unos 6,2 millones correspondientes a las devoluciones del Impuesto sobre la Renta de no Residentes (IRNR) de futbolistas y baloncestistas de, entre otros clubes, el Real Madrid, Barcelona, Atlético de Madrid, Valencia, Sevilla, Málaga, Osasuna, Hércules y Leganés.
El Mundo adelanta que la Sala de lo Civil y Penal del TSJM ha resuelto los recursos interpuestos por las defensas, la acusación particular (Agencia Tributaria) y el Ministerio Fiscal contra la sentencia de la Sección 23 de la Audiencia Provincial de Madrid confirmando la misma (las defensas pedían la libre absolución para sus patrocinados, pero han visto desestimadas sus apelaciones), pero elevando de los dos a los seis años la duración de la pena de cárcel para Leonor Sánchez-Caballero, quien fuera jefa de la Dependencia Adjunta de Asistencia y Servicios Tributarios de la Agencia Tributaria (estimando parcialmente los recursos de las acusaciones, que pedían penas más altas para todos los acusados) y a la que la Audiencia Provincial de Madrid condenó como autora de un delito continuado de utilización por funcionario público de información privilegiada.
Por lo que se refiere al resto de condenados, los abogados Juan Ignacio Torrontegui, Julio Lapausa y Manuel Val, a los que se les declaró culpables de la comisión de los delitos continuados de estafa y de falsedad en documento público, oficial y mercantil y de aprovechamiento de información privilegiada obtenida de un funcionario público, el TSJM mantiene condena a ocho años de cárcel dictada por la Audiencia Provincial de Madrid.
La red suplantó la identidad de futbolistas como el turco Nuri Şahin, el alemán Hamit Altıntop, el francés Aly Cissokho, el paraguayo Nelson Valdez, el portugués Tiago Gomes, el camerunés Pierre Webó o el lituano Marius Stankevičius y baloncestistas como los estadounidenses Charles Eidson, Dontaye Draper y Pete Mickeal, para solicitar la devolución de las retenciones a cuenta del IRNR a las que tenían derecho y no había reclamado. Lo hacían aprovechando la información que les facilitaba la funcionaria y sirviéndose de dos sociedades interpuestas: Asesores Deportivos Lapver y Star Athletes Society. Los condenados se apropiaban de la diferencia entre las retenciones del Impuesto sobre las Rentas de las Personas Físicas soportadas por los jugadores, en su condición de sujetos pasivos, en sus declaraciones tributarias efectuadas como residentes en España (y que abonaban a la Agencia Tributaria sus empleadores -los clubes- en su nombre) y las cuotas que realmente les correspondía ingresar como sujetos pasivos no residentes (vía IRNR).