CASTELLÓ. ¿Y si hubiera una corriente arquitectónica que no se explica en las universidades pero está ahí, existe? Una manera totalmente distinta de analizar el espacio urbano que nos rodea. Erik Harley entiende que sí y por eso ha sentado las bases de la teoría del 'Pormishuevismo'. Nombres como Santiago Calatrava y Pedro Zaragoza son algunos de sus mayores exponentes. Les deben sonar. Todos pertenecen a "la era dorada del despilfarro" en la construcción del Levante.
"Como si fuera la Carrie Bradshaw de la arquitectura explico a través de mis vídeos y de rutas guiadas todos los sistemas de corrupción que se esconden detrás de un simple edificio", aclara Harley, quien se considera experto en sacar todas esas triquiñuelas que hay detrás de las fachadas. "No me dio la nota para estudiar arquitectura, me gradué en Bellas Artes, pero después hice un postgrado en estudios de geografía. Y esta vertiente más artística y teórica me ha permitido entender el espacio de otra manera. Yo no te podría construir un edificio, pero sí que te lo puedo destripar. Me parece muy importante también hacerlo, porque los treinta metros de altura de un edificio vacío dicen mucho de nuestros años pasados".
Todos sabemos, por ejemplo, el sueño fallido en el que ha quedado Marina d'Or, pero ¿por qué? ¿qué pasó? "Salía Anne Igartiburu en la tele para publicitar la ciudad vacaciones más grande de Europa. Y aún hay mucha gente que tiene esa idea de Marina d'Or, de ser un complejo increíble, cuando en realidad vas y solo hay una carpa con maquetas, porque nadie invirtió el dinero suficiente. Es la España que ha habido siempre. Se trata de proyectar una imagen de turismo potente para que eso en sí funcione, pero es una manera muy loca de funcionar, porque no es real", opina Harley.
La de Castellón (el 29 de septiembre) será la segunda parada de un tour por el mediterráneo que empieza hoy mismo en Barcelona y seguirá el 3 y 4 de noviembre en València y el 10 de este mismo mes en Benidorm.
No es lo habitual, pero el público que asiste a las visitas guiadas del catalán son vecinos de la localidad. Gente que quiere profundizar en unas historias que les suenan de pasada, pero también un público local que tiene mucho que aportar. Es por eso mismo que, desde mucho antes del coronavirus, sus rutas se han limitado a unas pocas personas. "No me interesa dar el típico discursito de guía. De hecho, las rutas para turistas son las que se están cargando las ciudades. Te lo digo yo que he vivido en Barcelona. Es la consecuencia de tener un Marina d'Or o una Barcelona ahora misma desierta. En mi caso, me gusta además que los que participan me cuenten sus historietas si las tienen. Esto con más personas se pierde", asegura él mismo.
Para salirse totalmente del 'mapa' Erik Harley propone, además, unos recorridos de aproximadamente hora y media, que también tienen un poco de teatrillo. "Es importante que tomemos todo esto con humor. Por eso, al empezar la ruta me coloco mi casco y te empiezo a contar la historia que esconden los edificios que tenemos enfrente. Pero además, me gusta enseñar antiguas fotos de los sitios en los que estamos. De Marina d'Or podría ser perfectamente la imagen donde se ve a Carmen Sevilla y a Naomi Campbell en la inauguración. Esto sirve para que la gente entienda todo el faranduleo que hay detrás de la construcción".
Pero no solo son rutas, el experto urbano completa todo este movimiento 'pormishuevista' con una serie de vídeos donde combina la corrupción política, con el salseo y los pelotazos inmobiliarios. Así, solo en su primera temporada destripó 37 casos de Madrid y Barcelona. Ahora lo hará por la Comunitat Valenciana, para la que tiene preparada incluso un libro. "Me contactó durante la pandemia una editorial. Se llamará Pormishuevismo a la valenciana y recogerá cinco casos de corrupción. Desde la ex dueña del IVAM Consuelo Ciscar hasta Rita Barbera. Ella no era solo una alcaldesa, era una tertuliana profesional".
Para ponerle la guinda del pastel a todo este movimiento, Erik Harley pensó que sería buena idea hacer unos pendientes con ladrillos. Realmente creyó que sería buena idea para hacer la gracia entre su grupo de amigos, pero resultó que no. "Estaba las Navidades pasadas en casa de mi madre cuando me enseñó una caja con ladrillos de juguete que me habían regalado de pequeño. Había como unas 500 piezas y se me ocurrió convertirlas en pendientes. La gente flipó y se acabaron todas. Así que ahora he decidido crear yo mis propios pendientes a los que he llamado 'Periferia'".
"Entre 1998 y 2008 las ciudades españolas crecieron entre un 35-40% sobre lo construido en veinte siglos. Eso es arquitectura megalítica, íbera, céltica, romana, visigoda, (...) moderna y contemporánea. Esto son urbanizaciones vacías, pabellones polivalentes, campos de golf, museos de provincias, puentes de Calatrava y estaciones del AVE. Esto es 'Pormishuevismo'."