VALÈNCIA. La moción de censura sacada adelante por el socialista Pedro Sánchez provocó un cataclismo interno en el PP. Mariano Rajoy dejaba la política activa y convocaba un congreso extraordinario bajo el formato que se aprobó en el anterior cónclave y que incluye una primera vuelta con votación de todos los militantes del partido que se inscriban en el proceso.
Una cambio de era en la formación popular, que hasta ahora elegía a sus líderes a través de congresos únicamente conformados por compromisarios. Una fórmula que permanece vigente para la segunda vuelta, decisiva si dos de los aspirantes llegan a la ronda final. Una de las favoritas en este proceso es la ex vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría (Valladolid, 1971), quien atiende a Alicante Plaza en su visita a Alboraia para un encuentro con militantes.
La candidata popular, una de las dirigentes más próximas a Rajoy en los últimos años, analiza el proceso y recuerda a los afiliados que no solo se busca a un presidente del partido, sino también a un candidato "que pueda ganar cuanto antes a Pedro Sánchez". "Sé hacer oposición y sé lo que estar el Gobierno: tengo muchas horas de vuelo", se reivindica.
-¿Cómo está viviendo este proceso de primarias inédito en el PP? ¿Lo nota muy diferente a una campaña electoral normal?
-Sí, es distinto. Un proceso muy vivo, muy participativo, de contacto directo con la militancia. Nosotros teníamos antes otros procesos de elección, pero este es especialmente interesante por la inmediatez que tiene con el afiliado.
-¿Cree que es positivo este cambio de formato dentro del PP con la doble vuelta y la participación de todos los militantes o le está viendo carencias?
-Nunca habíamos utilizado este proceso a nivel nacional dado que se aprobó recientemente en nuestros estatutos. Indudablemente todo es susceptible de mejorar en futuras convocatorias pero no se pueden cambiar las reglas del juego en mitad de la partida.
-¿Piensa que debería haberse hecho antes en el PP este tipo de proceso?
-Nosotros hemos tenido siempre congresos absolutamente democráticos. El de ahora se enmarca dentro de un cambio general que se ha producido en todos los partidos y en la sociedad española. Ha llegado en un momento en el que el esquema está bastante asentado y creo que está siendo interesante para darle vida al partido y dinamizarlo.
-Un problema para el PP ha sido conseguir involucrar a los afiliados. Al final, hay unos 66.000 inscritos de unos 850.000 afiliados. ¿Cree que es una falta de costumbre de los militantes la participación o admite errores en la forma de afiliación del PP?
-Para empezar, hay que diferenciar en ese gruesto entre afiliados y simpatizantes. Creo que nosotros tenemos una militancia muy activa pero este es un proceso nuevo y el periodo de inscripción ha sido muy corto porque viene motivado por una moción de censura además de coincidir con unas fechas preveraniegas. En cualquier caso, hay que respetar a la militancia que ha querido inscribirse, que al fin y al cabo es un número importante. Hay líderes de partidos que se han elegido por menos de 6.000 votos y nadie ha dicho que no sean legítimos.
-¿Qué le dice a los afiliados para convencerles de que usted es la mejor opción y no las otras cinco?
-Nosotros elegimos a un presidente del partido pero sobre todo elegimos al candidato para las futuras elecciones. Tenemos que buscar a un candidato que sea capaz de ganarle a Pedro Sánchez lo antes posible y creo que yo soy esa persona. Por ganas, por experiencia, por preparación y porque es muy importante también para España que haya una mujer como presidenta del Gobierno. Tengo muchas horas de vuelo; sé hacer oposición y sé lo que es estar en el Gobierno y creo que eso es un grado.
-¿Qué línea quiere seguir o qué cambios pretende introducir en el PP si vence?
-Para empezar quiero hacer una campaña de afiliación y que las cuotas no sean un problema para participar en el partido. Fijar una cuota simbólica de un euro para pensionistas y parados, una reducida para jóvenes... soy partidaria además de que nuestro partido se abra mucho más a las comunidades autónomas, con una mayor participación de lo que son nuestras territoriales en la formación del discurso del partido. La gente más joven tiene también que formar parte en la estrategia de las políticas que definamos así como potenciar la formación de nuestra gente para afrontar debates, tareas de comunicación, labor en las asambleas legislativas...
-Parece difícil que haya pactos entre candidatos antes del 5 de julio, ¿confía en que puede haber algún acuerdo después del 5 para una candidatura única que evite la votación entre compromisarios?
-Yo desde luego planteo mi candidatura desde la integración y la generosidad y si hay oportunidades para ello deberíamos aprovecharlas.
-Y si usted queda fuera en la primera vuelta, ¿se plantea apoyar a algún otro candidato que le parezca buena opción?
-Yo siempre estoy a disposición del partido y seguiré a disposición de mi partido donde considere que debo estar.
-¿Cree que en este proceso resulta una ventaja haber estado durante tantos años cerca de Mariano Rajoy o a veces siente que los militantes prefieren otro nombre por aquello de la renovación?
-La mayoría de los aspirantes que nos presentamos hemos estado en el Gobierno o en el partido definiendo las estrategias. En mi caso, más desde el Gobierno y en el caso de Pablo Casado o de Dolores de Cospedal, más desde el partido, así que creo que es un debate de cara a la galería, más ficticio que real. Yo he sido vicepresidenta del Gobierno, Cospedal secretaria general del PP y Casado portavoz. Nadie llega nuevo, todos llegamos con una experiencia dentro del proyecto.
-¿Son tan irreconciliables las diferencias entre usted y Cospedal que hacen impensable que pudiera haber un acuerdo si llegaran al final?
-Decían algunos señores de nuestro partido que esto iba a ser una batalla entre señoras... ¿acaso se ha producido esto? Porque yo veo más agresivos, si se me permite la expresión, a los señores que a las señoras del partido. Las señoras están siendo muy señoras y hasta ahí puedo leer.
-En la Comunitat Valenciana parece que está obteniendo apoyo de una parte de las estructuras dirigentes. ¿Le apoya Isabel Bonig? ¿La ve candidata a la Generalitat si usted gana?
-Siempre he estado muy vinculada en mi experiencia de Gobierno a la Comunitat Valenciana y me siento muy querida aquí. En todos los problemas que ha tenido esta autonomía, desde el agua a la financiación, pasando por el asunto educativo, siempre han encontrado en mí apoyo, comprensión y mucho trabajo activo. Me siento parte integrante del equipo que hay aquí. Por supuesto he hablado mucho durante este tiempo con Isabel y respeto mucho la posición de neutralidad pública que ha adoptado. Por otro lado, creo que ha hecho un trabajo muy intenso y riguroso en un momento muy difícil de nuestro partido. Está sabiendo liderar un equipo que va a ganarle las próximas elecciones a Ximo Puig.
-Si usted es la nueva presidenta del Partido Popular, ¿apostará por hacer públicos cuanto antes los candidatos autonómicos y los locales como Valncia ciudad?
-En cuanto pasemos el congreso no podemos perder mucho tiempo en hacer esas designaciones y poner a la gente a trabajar cuanto antes de cara a las elecciones autonómicas y locales. De hecho, me implicaré al 100% con los candidatos para hacer la mejor campaña.
La exvicepresidenta del Gobierno entró en política en el año 2000 de la mano de quien siempre le otorgó su máxima confianza