ALICANTE. Ximo Puig quiere aprovechar también el efecto Salvador Illa para sus intereses políticos y los del PSPV en la provincia de Alicante. Y para ello, este martes escenificará (y dará las instrucciones necesarias) quién debe ejercer ese rol. Y ese papel lo desempeñará el actual secretario del PSPV en la provincia de Alicante y alcalde de Xàbia, José Chulvi, recién nombrado portavoz adjunto del grupo socialista en las Cortes Valencianas.
Puig reúne este martes, de manera semipresencial, a los diputados autonómicos por Alicante y los provinciales del PSPV en la Diputación. El objetivo es transmitir instrucciones de cómo se debe gestionar e interactuar en los próximos meses, en los que todavía se notarán, y mucho, los impactos de la crisis del coronavirus, tanto a nivel sanitario como económico.
Y para ello, Puig impulsará el protagonismo a Chulvi con un objetivo claro: el PSPV quiere consolidar su posición de primera fuerza electoral en la provincia de Alicante (lo fue en las anteriores elecciones generales, autonómicas y locales de 2019 ) y que eso redunde, meses después, en alcanzar los objetivos que no se lograron en junio de 2019, bien la Diputación Provincial, bien la Alcaldía de Alicante, que el PP logró retener con sus alianzas con Ciudadanos.
¿Por qué Chulvi y su comparación con Illa? Puig transmitirá a sus compañeros de grupo y miembros de la dirección que puedan asistir al acto (por las medidas de seguridad; otros lo seguirá por streaming) que es el momento de volcarse con la gestión; de atender las necesidades de colectivos y empresas afectadas por las restricciones y ofrecerles soluciones, las que en estos momentos tiene en cartera la Generalitat Valenciana para los colectivos afectados.
Puig no quiere que sus representantes piensen en clave interna, ni en congresos, ni tampoco en debates estridentes a la hora de confrontar con los rivales políticos, y mucho menos con los socios del Gobierno en el Botànic. En este contexto, el secretario general del PSPV quiere Chulvi ejerza un papel parecido al de Salvador Illa: que se muestre su capacidad de alcanzar acuerdos; que evite la confrontación y que ponga en el foco mediático las soluciones de la administración autonómica y, por extensión, las del Gobierno de España. El protagonismo, dice, Puig debe ser de las instituciones.
El refuerzo de Chulvi es también un mensaje para la militancia: le corresponde a él ejercer ese papel como máximo responsable del partido en la provincia de Alicante y, por lo tanto, ahora no deben sobreponerse debates sobre quién debe o no presentarse al próximo congreso. De momento, según el PSPV, no hay debate: el protagonismo le corresponde a Chulvi.
Y además, a todo ello se añade el perfil institucional de Chulvi: es alcalde, está en las Cortes Valencianas, conoce de primera mano los problemas de sectores claves en esta crisis como los autónomos y los hosteleros y puede tender puentes, según consideran en el PSPV. Desde el partido y el entorno de Puig sostienen que el primer edil puede ejercer, mejor que nadie, ese perfil y repeler los ataques políticos y apaciguar los ánimos de determinados colectivos.
Está claro que nadie discutirá la decisión, y menos en público, máxime cuando en el PSPV el objetivo, independiente del sector en el que los cuadros se sitúan, es gestionar lo mejor posible los efectos de la pandemia. Pero lo que no se sabe es si servirá para apaciguar los ánimos que hasta hace poco lamentaban el escaso protagonismo de Chulvi en la vida interna del partido.
La magistrada apunta a irregularidades administrativas y al desequilibrio en la distribución del dinero, pero no aprecia ilícito penal