ALICANTE. Doble reprobación del pleno de Alicante para los concejales de Compromís Natxo Bellido y María José Espuch por los contratos acordados con la fundación Escola Valenciana, en la que trabaja la pareja de Espuch y vicesecretario general de Compromís en Alicante, Ismael Vicedo. Las dos declaraciones institucionales presentadas por el equipo de Gobierno, del PP, han prosperado al recabar más votos a favor que en contra. En concreto, ha contado con los apoyos de los 8 concejales del PP y los 5 del grupo municipal de Ciudadanos (Cs). PSOE, Guanyar y los dos concejales no adscritos, Fernando Sepulcre y Nerea Belmonte, se han abstenido. Y Compromís, como era de esperar, ha votado en contra.
Las explicaciones facilitadas por Bellido y Espuch -en el caso de Espuch, las primeras que ofrece en público- no han evitado que prosperase un acuerdo que, en la práctica, no tiene ningún efecto ni consecuencia palpable, más que el de dejar constancia del rechazo institucional de manera pública frente a una conducta que se ha considerado impropia de todo cargo público. En sus intervenciones, ambos concejales han mantenido que no se ha producido ningún comportamiento reprobable por su parte y que los acuerdos que adoptaron durante la etapa en la que desempeñaron competencias de gobierno se ajustaron a la ética. En esta línea, no han contemplado la posibilidad de dimitir. Ni siquiera han mencionado esa palabra y sólo en el caso de Bellido, él mismo ha vuelto a admitir la posibilidad de que pudo haberse incurrido en errores y en la conveniencia de rectificarlos en lo sucesivo.
En primer término, se ha debatido la propuesta de reprobación sobre el líder de Compromís. La portavoz del PP, Mari Carmen de España, ha abierto el debate sobre la propuesta para recriminar a Bellido que hubiese desperdiciado los más de 25 minutos que había dedicado a explicar los acuerdos con Escola Valenciana, en un punto previo del pleno (su comparecencia a petición de Ciudadanos). Así, ha apuntado sobre cuestiones concretas que, a su juicio, Bellido no había explicado. "Lo que ha quedado claro es que hay una falta de vergüenza". Así, ha señalado que no se ha explicado por qué si la reunión para concertar la primera edición de la feria del libro se celebró en julio, Escola esperó hasta noviembre para registrarse como proveedor del Ayuntamiento. "Tampoco ha explicado por qué se pagó la nómina de un mes completo a la pareja de la edil Espuch cuando la Plaça del Llibre sólo duró cuatro días", ha añadido.
La edil no adscrita, Nerea Belmonte, por su parte, ha aludido directamente a Bellido para señalar que, hace tres años, "usted y los señores del tripartito sentaron unas bases de un juego muy peligroso, que es que las reglas nos las podemos inventar y modificar a nuestro antojo". "El discurso de la ética y la estética se le ha acabado", ha añadido. El segundo edil no adscrito, Fernando Sepulcre, ha confirmado que él no iba a reprobarlo pero le ha invitado a aprender en lo sucesivo. "Por la boca muere el pez, usted es preso de sus palabras", ha señalado.
En su turno, el propio Bellido ha señalado que ya había dado explicaciones sobre los acuerdos con Escola y ha sostenido que "la moción es ridícula porque es ridículo reprobar a un concejal de la oposición". "Sin embargo, no es ridículo que se investiguen los contratos con las empresas de las que un asesor suyo era administrador único", ha dicho. Acto seguido, ha sostenido que "nadie sacó un beneficio particular sobre la organización de la Plaça del Llibre" y ha vuelto a incidir, como ha venido haciendo en las últimas semanas, que "se contrató con una fundación sin ánimo de lucro", en alusión a Escola. Así, ha incidido en que Compromís "ha demostrado a lo largo de este mandato que ha primado la ética frente a otras cosas como la permanencia en el poder, algo que no ha hecho usted, que ha asumido el cargo que le ha brindado el transfuguismo".
Por último, ha incidido en que "el gasto con Escola ha sido fiscalizado y pagado sin ningún reparo técnico". "Tanto yo como Compromís somos conscientes de que las cosas se pueden hacer mejor" y ha acusado a Barcala de tener miedo a la cultura, a la educación y al valenciano. El alcalde ha tenido que llamarle al orden por excederse de su tiempo de intervención en un tenso cruce de reproches.
El portavoz adjunto de Cs, Antonio Manresa, ha recriminado que Bellido no se ajuste "al discurso de la ética y la estética que ha venido manteniendo desde 2015" y se ha preguntado si esa opción es "la que comparte el conseller de Transparencia, Manuel Alcaraz". "Ustedes no han venido a cambiar nada, se le ha caído la careta de la superioridad moral, de la rectitud, sea humilde, reconozca su error y haga lo que tiene que hacer", ha dicho.
El portavoz de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, ha señalado que tras la comparecencia de Bellido a petición de Cs, "parece haber quedado claro que no se vaya a asumir ningún tipo de responsabilidad política por parte de Compromís, cosa que sí hemos hecho otros grupos políticos. Y lo lamentamos, como también lamentamos la demonización que se ha hecho de la promoción del valenciano".
La portavoz del PSOE, Eva Montesinos, también ha incidido en que "si se ha caído un discurso, cada grupo debe asumir sus consecuencias, y si no, los ciudadanos ya se las cobrarán en las urnas". No obstante, ha insistido en que el PP no está en condiciones de pedir la reprobación de nadie "cuando la sombra de la sospecha les sigue persiguiendo por las condiciones en las que llegaron al poder y a los líos que maneja con sus asesores que están siendo investigados en Fiscalía". Por úlitimo, ha conminado a Bellido a reflexionar y asumir cuál debe ser su posición a la hora de aplicarse su exigencia de ética y estética.
Otro tanto ha sucedido por lo que respecta a la reprobación de Espuch. La portavoz del PP, De España, ha señalado que lo lamentable es que "usted esté todavía hoy aquí" y que "no haya dimitido ya". "Esto es una cuestión doméstica, todo queda en casa", ha señalado en referencia al contrato concedido a Escola, en la que trabaja su pareja, Ismael Vicedo, por el acto de proyección de la película Sufragistes. "Haga un favor a esta ciudad y dimita, usted y su portavoz", ha señalado, tras hacer alusión a dos términos con sus respectivas definiciones: "nepotismo" y "caradura".
La edil no adscrita, Belmonte, ha subrayado que la única diferencia que existe entre el caso por el que se acordó su expulsión del equipo de Gobierno, en marzo de 2016, y el caso de la adjudicación del contrato desde la Concejalía de Igualdad es que su pareja (la de Belmonte) no estaba percibiendo ningún sueldo por parte del Ayuntamiento, sino que "en ese momento estaba trabajando en Londres como camarero". El segundo edil no adscrito, Sepulcre se ha lamentado de un "espectáculo que debe de ser durísimo", sin más añadidos.
En su turno, la edil Espuch ha señalado que, hasta ahora, "se ha construido un relato lleno de falsedades en torno a la cuestión" que ella iba a tener que corregir. Ha señalado que, en efecto, Ismael Vicedo es su pareja, pero ha insistido en que con la concertación del acuerdo de proyección de la mencionada película no se ha incurrido en los supuestos que se refleja en la Ley de Incompatibilidades a los que se ha hecho alusión hasta ahora. Así, ha señalado que en esa norma se alude al deber de inhibición cuando se establezcan relaciones con los titulares o representantes legales de empresas con los que se mantenga un vínculo directo, pero ha señalado que "el señor Vicedo trabaja para Escola y su puesto es de administrativo; si se prefiere, es un currito". "Seguiría cobrando el mismo sueldo, si el Ayuntamiento hubiese comprado o no la proyección de la película Sufragistes", ha insistido. Además, ha abundado en que Escola es "una entidad sin ánimo de lucro, no una empresa en la que nadie haya obtenido beneficio alguno". "Estamos hablando de 1.492 euros para los derechos de autor, con cuatro pases a 373 euros, que disfrutaron los niños que fueron a ver la película", ha insistido. "No mienta señora De España, Ismael Vicedo no es el único trabajador de Escola, y fue la responsable de la sección de Cinema de Escola quien instó a Ismael Vicedo a ofrecer ese proyecto educativo a varios ayuntamientos de la provincia", ha insistido. Por último, tras otro tenso rifirrafe sobre la duración de su intervención con el primer edil, ha defendido que "aquí nadie se ha llevado calentito al bolsillo nada como usted está diciendo", en alusión a De España.
Espuch, sobre el pago a la entidad en la que trabaja su pareja: "Aquí nadie se ha llevado calentito nada al bosillo como usted dice"
El portavoz adjunto de Cs, Antonio Manresa, ha espetado directamente a Espuch que "usted también es una caradura política; se han saltado las líneas rojas que llevaban por bandera y además ha podido cometer un ilícito". "No estamos aquí para juzgar su conducta, pero sí por su falta de ética. Han actuado de tapadillo, pensaban que su actitud pasaría desapercibida", ha añadido. "Si la actuación de su portavoz es reprobable, su actuación es directamente mezquina, practica la doble moral", ha continuado. "La connivencia con su portavoz para saltarse las líneas rojas es de aurora boreal. Es que en este caso, la contratación la firmó usted", ha enfatizado. Así, le ha conminado a ser "congruente con lo que usted ha proclamado, aunque ya ha demostrado cuál es su falta de ética y su doble moral. Usted ya sabe lo que tiene que hacer y seguramente no lo va a hacer, pero sabe que se ha destruido su credibilidad".
El portavoz de Guanyar, Pavón, ha vuelto a incidir en la misma posición que ya había manifestado respecto a Bellido. "Lamentamos que no se adopten responsabilidades políticas y lamentamos el desprestigio de una entidad como Escola que desarrolla una magnífica labor en toda la Comunitat", ha señalado Pavón.
Su homóloga del PSOE, Montesinos, ha reprochado al PP "que hablen ustedes de nepotismo" y se ha limitado a recordar las mismas palabras que también ha dedicado a Bellido: "Decida usted si tiene que continuar como concejal. Mírese en el espejo y decida lo que tiene que hacer, nosotros no vamos a contribuir en esta propuesta de reprobación", ha concluido.