VALÈNCIA (EFE). La Confederación de Autónomos del Taxi de la Comunitat Valenciana ha exigido que las autonomías puedan regular y legislar el transporte urbano e interurbano en su territorio, así como crear un marco normativo propio para las autorizaciones de vehículos turismo con conductor (VTC).
El colectivo de taxistas ha señalado en un comunicado la necesidad de fijar el ámbito territorial de las autorizaciones, de forma que aquellas que no estén domiciliadas en la Comunitat Valenciana "deban obtener autorización para poder realizar transporte en la misma".
Desde el sector, han recordado que desde la modificación de la Ley de Transportes en 2009 se ha ido produciendo una liberación del sector, con la concesión ilimitada de licencias y el desequilibrio entre taxis y los VTC.
Por ello, se han mostrado dispuestos "a paralizar el país" hasta que se cumplan las exigencias de un sector que "se está viendo perjudicado hasta el punto de hacer la situación insostenible".
Han advertido que ante el nerviosismo creciente, cualquier acción imprevisible "será, entre otras cosas, responsabilidad del Gobierno, y de su falta de acciones efectivas para solucionar la situación" creada por la irrupción de este nuevo tipo de servicio.
La Confederación de taxistas ha exigido el cumplimiento de la limitación 1/30, por la que solo debe haber un vehículo turismo con conductor (VTC) por cada 30 taxis para evitar "la saturación del mercado de transporte".
También ha exigido modificaciones reglamentarias que controlen la captación de usuarios en la vía pública por parte de los VTC, que únicamente pueden circular si el servicio ha sido previamente contratado.
Desde la confederación han denunciado que "cientos de vehículos están circulando sin servicio o estacionando en zonas de influencia de demanda de usuarios".
Han solicitado que se establezca una base de operaciones para las plataforma Uber y Cabify desde la que deberán partir sus vehículos con un tiempo mínimo de una hora desde la contratación del servicio hasta su recogida, para evitar la captación de clientes.
Asimismo, han solicitado la creación de una página web que registre todos los servicios contratados y los controle, un distintivo homogéneo "discreto" para los VTC y que no se permita la cesión de la actividad a terceros como hacen Uber y Cabify.
"Muchas autorizaciones cuyo titular son personas físicas o jurídicas, son gestionadas por 'conductores contratados', que en realidad son falsos autónomos con contratos por disposición", han denunciado.
Desde el sector han denunciado que no existe un epígrafe fiscal para este tipo de vehículos y han solicitado que, "ya que comenzó como un servicio de representación y alta gama", se le establezca un IVA del 21 por ciento.
Por último, la confederación ha hecho un llamamiento de ayuda a las administraciones para reforzar el sector del taxi como servicio público y que sea incluido como colectivo especial, "reconociéndose así las enfermedades profesionales que padecemos y poder solicitar, en su caso, la jubilación anticipada con un mínimo de años de actividad cotizados".
