ALICANTE. Doble objetivo conseguido. El equipo de Gobierno del PP en el Ayuntamiento de Alicante también consigue aprobar la tercera modificación de crédito del presupuesto de 2018 para impulsar obras por un importe global de 12 millones de euros. La propuesta ha prosperado en el pleno gracias a los votos de Guanyar (5 ediles) y de los dos concejales no adscritos, Fernando Sepulcre (ex de Ciudadanos) y Nerea Belmonte (ex de Guanyar). Los representantes de PSOE, Ciudadanos y Compromís, por su parte, han mantenido la posición manifestada en la comisión informativa de Hacienda, la semana pasada, y se han vuelto a abstener.
En realidad, la posición de Sepulcre ya era conocida (votó a favor en la comisión) y Guanyar ya había adelantado que, como mínimo, no iba a votar en contra, puesto que el 80% de las actuaciones previstas con ese cambio presupuestario correspondía a proyectos impulsados desde las concejalías de Urbanismo y Medio Ambiente, durante el tiempo en el que ambas áreas recayeron bajo responsabilidad de sus representantes municipales. Así, la única novedad que ha deparado la votación ha sido el nuevo voto a favor de la edil no adscrita (ex de Guanyar), Nerea Belmonte, quien también ha propiciado, este lunes, que el PP saque adelante su propuesta de modificación de las ordenanzas fiscales. Belmonte fue quien también facilitó que el popular Luis Barcala se convirtiese en nuevo alcalde de Alicante en sustitución del socialista Gabriel Echávarri al emitir un voto en blanco en el pleno de investidura del pasado 19 de abril. Barcala se convirtió en primer edil como candidato de la lista más votada en las municipales de 2015, después de que Belmonte cambiase la postura que defendió entonces, a favor de la toma de posesión de Echávarri, y se abstuviese de votar a ningún candidato, a sabiendas de que su posición iba a resultar clave en el resultado de la elección.
En el pleno, al margen de los grupos de la oposición, han intervenido cuatro representantes vecinales de otras tantas asociaciones que han solicitado cambios en las inversiones previstas, de un modo similar al planteamiento esgrimido por PSOE y Compromís. A grandes rasgos, todos los grupos políticos han mantenido sus posiciones. Así, PSOE y Compromís han incidido en que se trataba de una contradicción rebajar impuestos y reducir ingresos por 4,5 millones en concepto de la recaudación del IBI y, al tiempo, solicitar un crédito de 8 millones para financiar obras. Cs ha reiterado su apuesta por aplazar esas inversiones a la elaboración del próximo presupuesto sin maniatar a la corporación municipal que surja de las elecciones de 2019.
La propuesta concreta que ha quedado aprobada comprende un cambio presupuestario de 13.931.282,95 euros, 12 de los cuales se destinarán a la la ejecución de proyectos pendientes en barrios de la ciudad, priorizando aquellos que responden a demandas vecinales, según fuentes municipales. En cuanto a las inversiones en barrios de Alicante, con la aprobación de la modificación de crédito se podrán ejecutar inversiones por valor de casi 600.000 euros para la reparación y el mantenimiento de calzadas, aceras, señalización vertical y horizontal, mejora de la accesibilidad en las vías públicas, renovación y adecuación de juegos infantiles y mobiliario urbano y obras en colegios públicos, entre otros.
El expediente de modificación de crédito incluye 4 millones de euros, procedentes del remanente de Tesorería tras la amortización de los créditos del Plan de Ajuste, para la ejecución de inversiones sostenibles, como el acondicionamiento del entorno de la Isleta de la Albufereta, las obras de mejora de eficiencia energética del alumbrado de la Zona EDUSI 3 Fase, nuevas infraestructuras ciclistas, rehabilitación de zonas deportivas y la adquisición de vehículos para la Policía Local, entre otros proyectos.
Por otro lado, se incluyen otros 8 millones de euros para inversiones prioritarias en la ciudad, tales como la urbanización de la Plaza Ciudad de la Justicia, la recuperación arquitectónica del Castillo de San Fernando, la urbanización de la parcela docente de la Cañada del Fenollar, la renovación del Parque de Lo Morant, la reforma de la Plaza de la Viña y otra serie de proyectos demandados por la ciudad. Estas inversiones se financiarías a través de un préstamos con entidades financieras a largo plazo.
La modificación de crédito prevé, entre otras cuestiones, aumentar en 178.759,19 euros la partida destinada a ayudas para la inclusión social, 499.451,26 procedentes de los fondos FEDER de la Comunidad Valenciana conforman una inversión de 1.208.672,04 euros, 923.000 euros para suministros de energía eléctrica, agua para parques y jardines, mantenimiento y reparación de equipos en dependencias e instalaciones deportivas y, en especial, para atender el pago de una factura de noviembre de 2017 por suministro eléctrico.
Todos los grupos políticos han valorado el alcance de las decisiones aprobadas en el pleno con las esperables discrepancias sobre su oportunidad. En primer lugar, el alcalde, Luis Barcala, ha mostrado su satisfacción y ha agradecido elesfuerzo realizado por los funcionarios de la concejalía de Hacienda y los grupos políticos para poder aprobar esta modificación de impuestos, de modo que pueda entrar en vigor a partir del 1 de enero de 2019. "Hemos salvado la legislatura con la cancelación del Plan de Ajuste, primero, y ahora con la rebaja fiscal y un paquete de inversión que responde alas necesidades de los alicantinos", ha destacado.
"Hoy nos jugábamos mucho y si no hubiera salido la reforma fiscal el tripartito le hubiese dado carpetazo a la legislatura", ha subrayado. En esta línea, ha añadido que "hemos cumplido el compromiso que el Partido Popular llevábamos en nuestro programa electoral de bajar los impuestos". "Hoy es un gran día para los alicantinos. Somos 8 concejales solo, pero con valentía trabajamos como si fuésemos muchos más. Serán otros los que tengan que explicar porque no quieren que se baje el IBI a los alicantinos".
Respecto a la tercera modificación de crédito, Barcala, ha manifestao que "no vamos a dejar que se pierda de un minuto invertido por este Ayuntamiento y no podríamos aceptar un nivel de ejecución tan bajo como el de 2017 con un gobierno tripartito y del PSOE que apenas llegó a un 19% del presupuesto".
El concejal de Hacienda, Carlos Castillo, también se ha referido a la capacidad de los populares a la hora de buscar consensos y conseguir mayorías para sacar adelante los asuntos de la ciudad. "Gobernamos con una minoría absoluta de 8 concejales, pero somos capaces dialogar y encontrar puntos de consenso". El responsable de Hacienda ha defendido la bajada de impuestos porque "este Ayuntamiento tiene un excedente de recaudación y es mejor que esté en el bolsillo de los ciudadanos". "Con esta bajada de impuestos se va a atraer más inversión, crear puestos de trabajo y se van a beneficiar las empresas, los autónomos, las personas con movilidad reducida y discapacidad; va a potenciar el comercio, el consumo eficiente de energía y la compra de vehículos sostenibles", ha resaltado Castillo, que también se ha felicitado por haber logrado sacar adelante un paquete de inversiones tan importante "después de tres años de parálisis municipal con el gobierno tripartito".
Por el PSOE, su portavoz municipal Eva Montesinos, ha señalado que "hoy se ha vuelto a ver al señor Barcala apoyándose en la tránsfuga que le dio la Alcaldía, una señora que resultó elegida en una lista de izquierdas pero que apoya una medida que beneficia más a los que más tienen". "Lo que se ha escenificado es que el PP está hoy más solo que nunca y que la ciudad paga las consecuencias de esa soledad; las medidas que presentan en el pleno son electoralistas y evidencian una nula capacidad de trabajo", ha apostillado.
Su homólogo de Compromís, Natxo Bellido, ha defendido que "el minigobierno del PP ha perdido una oportunidad de generar consensos y para poder llevar las cosas adelante de forma unánime, pero prefieren escudarse en esa nueva derecha que está constituida por el PP, por su muletilla de Cs y por el transfuguismo político; esa mayoría de derechas que ha robado la legitimidad democrática de las urnas que votaron una mayoría de izquierdas en este pleno". En esta línea, ha señalado que "han preferido en lanzarse a una propuesta demagógica para bajar impuestos, bajando impuestos a los que más tienen, y después, sacar una propuesta de inversiones que son necesarias, por eso no hemos votado en contra, pero que debían haber negociado con la oposición y con las juntas de distrito de la ciudad".