El portavoz de Cs Javier Gutiérrez.ALICANTE. Después de ocupar titulares de gran tipografía, la Diputación de Alicante ha aprobado los primeros informes de fiscalización de la contabilidad de los grupos políticos. En concreto, los de 2015 y 2016, y que obliga a todos los grupos de la anterior corporación a devolver cantidades por las ayudas recibidas, como ya publicara Alicante Plaza. Hasta ahora, el debate lo había centrado Compromís y el PP y ha generado múltiples polémicas, denuncias y peticiones de información al Síndic de Greuges. Sobre todo, por las transferencias que el grupo popular hizo en el mandato pasado a las arcas del partido, sin haber exhibido las justificaciones, como le exige Compromís.
El debate ha sido corto pero intenso. Casi todos los grupos se han vanagloriado de que se fiscalicen las cuentas, aunque cada grupo ha hecho su interpretación. Quizás todos han lamentado que se hiciera con tanto retraso pues en el segundo año de este mandato se están aprobado los informes de años 2015 y 2016, cuando algunos políticos, como EU, ya no tiene representación.
Compromís ha querido que el debate fuera una causa más amplía y ha introducido la cuestión del transfuguismo, tras la reciente moción de censura de Agres, donde el PP ha aúpado a un edil no adscrito a la Alcaldía. Incluso, el portavoz, Gerard Fullana, ha vertido alguna sospecha por la manera de proceder de Intervención, pues, según ha denunciado, los informes hace tiempos que estaban elaborados, pero dormían en un cajón. Mazón le ha replicado no admitía sospechas hacia los trabajadores de la casa. Pero Fullana ha intentado convencer a POSE y a Ciudadanos para le ayuden a que el PP muestre las facturas sospechosas.
Pero ese intento de Compromís de generar una causa general, ha tenido dos consencuencias: Ciudadanos ha aprovechado el debate para marcar distancias con el PP, sobre todo, con el viejo PP, el del anterior mandato, que se dejó el marrón de las cuentas de los grupos por aprobar, quizás a sabiendas que era discurrir por tierras movidizas (y peligrosas). Y también para dar un toque de atención a Compromís en el debate de los tránsfugas y recordarle que en Teulada gobierna con dos de ellos, procedentes de Cs.
Por ello, el portavoz del grupo de Ciudadanos (Cs) en la Diputación de Alicante, Javier Gutiérrez, ha pedido este miércoles a todos los grupos políticos presentes en esta institución en la anterior legislatura, PP, PSPV-PSOE, Compromís y EU, que "restituyan las cantidades no justificadas a la mayor brevedad”. "Es una obligación legal y, sobre todo, moral de esta Corporación reclamar a los causantes de ese quebranto, cualquiera que fuera la formación política que les diera el acta, y pedirles que restituyan estas cantidades”, ha argumentado el diputado de Ciudadanos, formación política que gobierno en coalición con el PP en la Diputación de Alicante en la presente legislatura.
Gutiérrez ha coincidido en algunas cuestiones con Compromís y el PSPV, como el "el hecho de que se han precisado cinco años para dejar liquidadas las asignaciones entregadas a los grupos políticos y asombra también que todos los presentes en la Corporación anterior tengan aún cuentas pendientes de justificar o devolver”. En eso, el portavoz socialista, Toni Francés, también ha sido muy crítico.
Y sobre las cuentas de Cs en 2015 y 2016, que también le obligan a devolver unos 2.000 euros, Gutiérrez ha afirmado que “la dotación económica fue recibida y gastada” por el exdiputado Fernando Sepulcre, como único integrante del grupo político Ciudadanos desde el inicio de la legislatura en 2015 hasta junio del 2016, fecha en la que abandonó la formación. “Recae sobre esta persona la responsabilidad contable directa, y por lo tanto, debe responder ante esta Diputación”, ha sentenciado.
Gutiérrez ha exigido a todos los grupos “respetar las reglas democráticas y exigir que no vuelvan a producirse sucesos como la lamentable actuación del PP en la pasada legislatura, facilitando el transfuguismo del señor Sepulcre y recompensando esa conducta, haciendo la vista gorda a los defectos en la presentación de sus cuentas”. Ha recordado, igualmente, que todos los partidos representados en la Diputación de Alicante facilitaron "el pacto nacional contra el transfuguismo" y eso les "obliga a una conducta ejemplar”.
Al final, el debate ha acabado casi como había comenzado, con los reproches de Compromís y PSOE al retraso de la fiscalización; el PP vanagloriándose de que la fiscalización sea un hecho y Ciudadanos repartiendo para todos. Finalmente, sólo los dos partidos del equipo de gobierno han aprobado esa fiscalización; el PSPV se ha abstenido y Compromís se ha opuesto con el claro objetivo de tener argumentos y base legal para estirar el tema en los juzgados.
