VALÈNCIA (EP). La portavoz del grupo popular en las Corts, Isabel Bonig, ha pedido este jueves al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que se alinee con el PP y con los empresarios turísticos y "diga 'no' a la tasa turística". "No necesitará los ocho votos de Podemos, tendrá en los Presupuestos los 30 votos del PP porque queremos ayudarle y aquí está el PP para ayudarle", ha dicho.
Así lo ha indicado durante la sesión de control al presidente, quien ha respondido a la síndica que "si quiere ayudar de verdad a la gobernabilidad de la Comunitat Valenciana, lo primero que deben hacer es no generar conflictos estériles que no van a ningún sitio".
La sesión ha comenzado con gran intensidad con las críticas de Bonig a la "nefasta" gestión realizada por cada una de las consellerias. Por ejemplo, ha lamentado que exista la Conselleria de Transparencia cuando hay "nueve sentencias condenatorias por opacidad y por no facilitar documentación a la oposición, la baja ejecución en Economía entre "tuits ofensivos", la "ideología pura y dura" en Educación en la que los tribunales y la "masa silenciosa ciudadana" han obligado a "claudicar".
También se ha referido a la justicia, asegurando que "lo único que tenían que hacer era mantener la Ciudad de la Justicia y va y se les quema" y ha criticado que se incluyan 1.000 millones "ficticios" en los presupuestos y se dejen 1.235 sin ejecutar. "¿Para qué quieren dinero? Primero trabajen y después hablamos. ¿Qué espera para cesar a sus consellers ante la nefasta gestión?", ha preguntado.
Puig ha respondido: "No voy a cesar a ningún miembro del Consell, está haciendo renacer la Comunitat Valenciana; si tuviera que cesar a alguien cesaría a la jefa de la oposición".
Además, ha asegurado a Bonig que "si quiere dialogar, la Generalitat está absolutamente dispuesta a hablar de todo" pero ha pedido a los 'populares' que dejen de hacer demagogia en torno al IVO y ha remarcado que en materia de plurilingüismo no van a renunciar "nunca" al objetivo de "superar la hipoteca de fracaso escolar" que dejó el PP y que los alumnos sepan castellano, valenciano e inglés, algo "irrenunciable". De los instrumentos para lograrlo, ha dicho, "se puede hablar", pero las finalidades "son las finalidades".