VALÈNCIA. Alicante muestra el camino a València para solucionar el atasco en las licencias de obra. Los promotores celebran un cambio significativo en la segunda ciudad de la Comunitat, pero mantienen sus críticas ante la situación que, a su juicio, persiste en el Cap i Casal. "En Alicante el escenario era muy parecido, pero hubo una interlocución muy positiva y se han comprometido a reducir los plazos de concesión de licencias a entre 3 y 6 meses. Afortunadamente ya hay algunos casos", afirma Antonio Olmedo, presidente de la Federación de Empresas Promotoras y Agentes Urbanizadores de la Comunitat (Feprova) y de la Asociación Provincial de Promotores Inmobiliarios y Agentes Urbanizadores de Valencia.
Uno de estos casos satrisfactorios lo ha experimentado la promotora ASG Homes. El consejero delegado de la firma, Víctor Pérez-Arias, explicaba la semana pasada en València que "los cambios realizados por el Ayuntamiento han permitido que se reduzcan los periodos". "En Alicante, donde tenemos varias inversiones, ya hemos tenido licencias en 6 y 8 meses. Ahora están volando, van muy rápidos", detalló.
Por contra, el dirigente lamentaba que "tras más de un año de trámites" siguen sin licencia para su proyecto en el barrio valenciano de Malilla. "Deberían solucionarlo cuanto antes, porque el dinero es miedoso. Si fueran más ágiles las licencias ya estaríamos trabajando en un segundo proyecto en València", alertó.
El giro que aplauden los promotores en el Ayuntamiento de Alicante se ha producido en los tres últimos meses, coincidiendo con la salida de Guanyar del equipo de gobierno (por la doble imputación del alcalde, el socialista Gabriel Echávarri) y la asunción de las competencias de Urbanismo por el PSOE.
El secretario general de la asociación de promotores de Alicante (Provia), Jesualdo Ros, se felicita porque la situación "ha cambiado de la noche al día" y se ha dado salida a expedientes que llevaban paralizados hasta dos años. A juicio de Ros, el cambio estriba en la "voluntad política de los gobernantes, porque los funcionarios del área son los mismos, y son gente muy competente". "La explicación estriba en qué indicaciones se les da", sostiene.
Según los datos de la concejalía, Urbanismo ha impulsado la resolución de cerca de 40 expedientes por un valor superior a los 33 millones de euros desde que el área depende de la edil socialista Eva Montesinos. El departamento ha hecho especial hincapié en aquellos expedientes que habían superado notoriamente la fecha de resolución.
De esta forma, en solo cien días los socialistas han superado el ritmo de concesión de licencias de Guanyar al otorgar 20 licencias por algo más de tres millones. "Con la llegada del PSOE a la concejalía transmitimos la preocupación y la importancia de desbloquear el parón que ha sufrido durante dos años un área tan relevante como es Urbanismo, por lo que optamos por la optimización de recursos propios como primera medida", señalan.
En concreto, en estos casi tres meses se ha dado luz verde a 37 licencias de obra mayor, desde las más simples hasta proyectos de mayor envergadura, circunstancia que además ha permitido incrementar los ingresos. "La nueva gestión de la concejalía ha supuesto una mayor recaudación, en aproximadamente 1,3 millones de euros correspondientes al Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO)", afirman.
Desde Provia avalan los datos del Ayuntamiento. "No han conseguido el objetivo al que se comprometieron en nuestra última reunión, pero se han quedado muy cerca", admite su secretario general. "Aún queda mucho por hacer, porque lo que ha salido ahora llevaba dos años parado, pero sin duda estamos en el camino correcto". Ros no se atreve a establecer un tiempo medio de resolución de los expedientes, precisamente porque los que han salido ahora acumulaban un gran retraso. "Es pronto para decirlo, habrá que ver cómo evoluciona la situación", agrega.
Preguntadas al respecto, fuentes de la Concejalía de Desarrollo Urbano de València, dirigida por el socialista Vicent Sarrià, afirman que ya se está produciendo una "reducción paulatina" del tiempo de espera de las licencias, si bien reconocen que tienen todavía "trabajo por hacer" y que el escenario actual "no es bueno para los promotores". El departamento agrega en la misma línea que está "preparando refuerzos y recabando datos", sobre los que hará anuncios en breve.
Por contra, Antonio Olmedo lamenta que en la capital del Turia "se mantiene un gran problema". "La situación es muy grave, no detectamos una mejoría", afirma, y agrega que "el atasco en la ciudad de València, que tiene unos 75 proyectos inmobiliarios en marcha, supone además una pérdida de ingresos para las arcas municipales". "No se genera empleo, no se pagan impuestos y no se genera un bien social indispensable como es la vivienda, es un círculo vicioso", concluye el presidente autonómico de los promotores.