VALÈNCIA. La transición energética en la que están envueltos muchos sectores pasa indiscutiblemente por un proceso de electrificación del sector de la movilidad y del impulso de las energías renovables. De ahí que se estime que para 2030 la demanda de baterías se multiplique por quince, llegando a los 9 TWh. Un aumento en el que los vehículos eléctricos tendrán un papel muy destacable —en 2035 estará prohibido comprar vehículos nuevos de combustión—, aunque también tendrá buena parte de culpa el almacenamiento estacionario, capaz de almacenar energía y liberarla en forma de electricidad cuando sea necesaria.
Para abordar los retos y oportunidades a los que se enfrenta la Industria del reciclaje de baterías a nivel mundial, la plataforma internacional ICBR celebra del 6 al 8 de septiembre en València su 28 Congreso Internacional de Reciclado de Baterías ICBR, que reúne a la comunidad internacional de expertos y responsables para abordar los retos y desafíos del sector.
Así, cerca de 600 participantes se reunirán en el Palacio de Congresos de Valencia para abordar los diferentes aspectos del fin de vida de las baterías, desde la logística hasta el almacenamiento y manejo seguro para su posterior reciclado, además de analizar el sector y sus desafíos. Un punto de encuentro que también es una oportunidad única hacer networking y conocer las últimas tecnologías e investigaciones en el ámbito del reciclaje de baterías.