Askua Barra en Madrid (en la zona de Alcalá), 'restaurante de producto' tras lo que andan los hermanos Nacho y Jorge Gadea. Sala y cocina. Cachorros de Ricardo Gadea (su padre), el “cancerbero del producto” —fantástica definición de uno de los cronistas gastronómicos que más respeto: Borja Matoses. Fue precisamente Matoses, en las páginas de El Mundo, quien lo premió como el restaurante (como el profesional) más importante de España en cuanto a su “implacable en la búsqueda y ejecución de las mejores materias primas”. Por delante de Berto de O'Grove, Sacha Hormaechea o Juanjo López de La Tasquita de Enfrente.
Askua Barra tiene, grosso modo, los mismos precios que su casa madre. La diferencia es que en Madrid llenan prácticamente todos los días —y en Valencia: no. Tampoco comparte la excelencia en sala: lo de Madrid es un espacio casual con mesas desnudas frente al lujo tranquilo de Valencia; los manteles son de lino y el mobiliario (y cubertería) de clásicos como Ingo Maurer o contemporáneos como Viccarbe. Y sin embargo...