BENIDORM (EFE). La Conselleria de Medio Ambiente, a través de la empresa pública Vaersa, acometerá los trabajos para volver a poner en funcionamiento la planta de tratamiento y clasificación de envases ligeros de Benidorm con una inversión de alrededor de cinco millones de euros.
Así lo ha anunciado hoy el secretario autonómico de Medio Ambiente, Juliá Álvaro, en una visita realizada a la instalación en compañía del alcalde de la localidad, Toni Pérez.
Esta planta se quemó en enero de 2009 como consecuencia de un incendio forestal que afectó a varios términos municipales y quedó inutilizada desde entonces.
Álvaro ha precisado que su departamento invertirá un millón en la obra civil de la planta y otros cuatro más "en la maquinaria y aparataje" de la infraestructura, para lo cual se ha solicitado un crédito al Instituto Valenciano de Finanzas.
El objetivo es "haber acabado los trámites administrativos en dos o tres meses" y después ejecutar el resto del trabajo de puesta en funcionamiento, "que se calcula en 18 meses para terminarlo".
Desde el incendio de 2009 las plantas de Picassent y Alzira, en Valencia, han realizado las funciones de la de Benidorm, lo que suponía "una importante carga de trabajo que ponía en riesgo su durabilidad", ha señalado Álvaro, quien ha precisado que, en especial, la planta de Picassent podrá bajar la carga de trabajo "en un 60%".
Una vez puesta en marcha de nuevo la planta de Benidorm, ésta podrá atender alrededor de 19.000 toneladas de envases ligeros al año y en una primera fase supondrá la creación de 22 puestos de trabajo directos.
"También descenderá en gran medida el tránsito de camiones hasta esas plantas con lo que ello supone de ahorro y de disminución de emisiones de CO2" ha añadido.
Cuando esté finalizada, el recinto dará servicio a toda la provincia y, según el secretario autonómico de Medio Ambiente, "no sólo será el centro neurálgico en el tratamiento de estos residuos sino que lo podrá asumir de forma correcta y con un rendimiento ajustado a la normativa europea.