ALICANTE. Una aplicación que permite que, durante una conversación de dos horas entre arquitecto y cliente, un proyecto arquitectónico pueda mostrar a tiempo real, como la geometría del proyecto nace, crece, se modifica y evoluciona hasta que queda terminado. Y de forma sencilla. Es el novedoso sistema que ha creado Gresmes, un Grupo de Ensayo, Simulación y Modelización de estructuras en Ingeniería Civil y Arquitectura, con sede en la Universidad de Alicante (UA). La principal innovación de su invento, patentado, reside en la utilización de un procedimiento automático que agiliza enormemente el desarrollo de un proyecto arquitectónico. Para ello usan diagramas de Voronoi, que permite obtener de una forma rápida de las diferentes posibilidades de distribución de los usos en el espacio.
Además, aseguran desde el grupo, el procedimiento es sencillo. Durante esa conversación, se hacen multitud de preguntas al cliente, unas relacionadas con el programa, otras sobre su forma de vivir y otras sobre datos más personales de quienes en unos meses ocuparán su vivienda. De las contestaciones de estas últimas preguntas se extraen una serie de números que definirán la geometría del perímetro y la división interior de espacios de la vivienda proyectada.
Ahora, Gresmes, con un equipo que tienen en la UA tres grandes áreas de actuación; la colaboración con empresa, la investigación y la docencia, busca empresas interesadas en adquirir esta tecnología para su explotación comercial.
Este invento no es solo una idea, sino que ya hay resultados palpables realizados mediante los diagramas de Voronoi por el grupo de Gresmes, de la UA. Por ejemplo, un prototipo de vivienda de madera elaborada con esta tecnología y que fue expuesta en Firamaco, la principal feria de Reforma y Rehabilitación de la provincia de Alicante. Lo bautizaron como "Arquitectura de Identidad" y es una muestra de la personalización y facilidad de diseño en tiempo real durante una conversación entre el arquitecto y las personas que las habitarán.
Además, con la ayuda de este novedoso procedimiento ya se ha finalizado la construcción de una vivienda unifamiliar en Polop de la Marina, en Alicante, y ya trabajan con ocho viviendas más en fase de proyecto.
Lo que ha logrado este equipo con su patente es acelerar el proceso para distribuir los usos en el diseño del espacio arquitectónico. Se trata de un proceso repetitivo que, gracias al software especializado y algoritmos que dan como resultado las geometrías de los polígonos de Voronoi se ha simplificado.
Ahora, pueden desarrollar variantes singulares de un mismo proyecto arquitectónico a gran velocidad y su ágil modificación. También permite que participe el cliente en esas decisiones y cambios en tiempo real y al final será un proyecto totalmente único que será resultado de un diagrama compuesto por una combinación de números aportada por el cliente.
Por otro lado, se puede aplicar tanto en viviendas sobre superficie plana, como en pendiente, de una única altura o edificios de hasta cinco plantas, de nueva construcción o reforma de viviendas sin incrementar el precio final de la vivienda.
El nuevo procedimiento, según el grupo Gresmes, podría aplicarse dentro del sector de la construcción y arquitectura, especialmente en promotoras y constructoras, y en firmas de procesos industrializados de la construcción, porque se puede construir la casa en un taller y luego trasladarla a la parcela en cuestión. Las compañías dedicadas a la construcción de viviendas modulares son otras de los objetivos. De este modo, el grupo de investigación busca empresas interesadas en adquirir esta tecnología para su explotación comercial mediante acuerdos de licencia de la patente.
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