VALÈNCIA (EP). La Conselleria de Transición Ecológica ha publicado las ayudas de 2,4 millones de euros a la construcción de instalaciones de preparación para la reutilización y reciclaje residuos textiles. La convocatoria persigue revertir la tendencia actual que mantiene en torno al 10 por ciento el porcentaje de estos residuos que se destinan a reutilización y reciclaje, así como avanzar en la normativa europea que obliga a implementar la recogida separada de la fracción textil antes de 2025.
Las bases señalan que podrán ser beneficiarias de la subvención las entidades gestoras de residuos textiles, cuyas instalaciones estén inscritas en el Registro General de Gestores Autorizados de Residuos de la Comunitat Valenciana.
La ayuda podrá cubrir hasta el 90% de los gastos, con un importe máximo de 200.000 euros, para todos aquellos proyectos iniciados después del 1 de marzo de 2020 y finalizados antes del 1 de julio de 2025, ha detallado la Generalitat en un comunicado.
La convocatoria se enmarca en el componente 12 'Política Industrial España 2030' del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que presta apoyo a la implementación de la normativa de residuos y garantizar el cumplimiento de los objetivos comunitarios.
La dotación de 2,4 millones de euros se añade a la de 1,3 millones de euros de ayudas a municipios y entidades locales para la adquisición de contenedores y sacas reutilizables para la recogida de residuos textiles, así como para acciones de educación ambiental sobre la importancia de depositar esta fracción en ecoparques y puntos limpios habilitados. La convocatoria completa se puede consultar en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV).
La consellera de Agricultura, Mireia Mollà, ha puesto en valor el "potencial" para la Economía Circular del recurso textil usado, a través de una red de instalaciones de preparación que faciliten su reintroducción en la cadena de valor. Asimismo, ha hecho hincapié en el consumo intensivo de materias primas y recursos asociado a la industria textil, entre los que destaca el agua, que una gestión circular "podría optimizar".