El Pepé se la juega con un señor de Orense. Con el cadáver aún caliente del joven Casado, los gerifaltes del partido han apañado el advenimiento de Feijóo a la presidencia. El elegido presume de gestor moderado, pero no da ni frío ni calor. Lejos está de despertar entusiasmo entre los votantes
"Es una decisión meditada, pero precipitada por los acontecimientos", admite a falta de horas para que oficialice su anuncio ante los suyos
La oposición le presiona para que desvele sus planes y advierte de los "riesgos" para Galicia de que pueda compaginar dirigir la Xunta y el PP
El lío catalán supondrá, a medio plazo, el certificado de defunción política de Mariano Rajoy. El fracaso de su partido en el Principado, tras una calamitosa gestión de la crisis forzada por los independentistas, se extenderá al resto del país. Tiene pie y medio en la historia. Si tuviera sentido común o una brizna de patriotismo, convocaría elecciones