Últimamente, los datos recibidos han sido algo dispares. Mientras que los mercados laborales parecen estar en una senda de suavización volátil, la inflación en particular se sigue comportando de forma obstinada. El último dato del IPC de noviembre, que se ajustó a las expectativas, puede seguir apuntando a una moderación continuada del aumento de los precios, pero sin duda este proceso ha perdido algo de impulso en los últimos meses.
No obstante, creemos que el avance desinflacionista registrado hasta la fecha mantiene sobre la mesa algunos recortes adicionales de los tipos, pero al mismo tiempo esperamos que los banqueros centrales ralenticen el ritmo de los recortes tras la reunión de diciembre. Más allá de eso, el principal elemento desconocido sigue siendo la política fiscal y comercial de cara al futuro.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, fue bastante claro en la última reunión al no asumir ni anticipar, pero creemos que, como mínimo, la ampliación de las disposiciones de la TCJA (La Ley de Empleos y Reducción de Impuestos) probablemente debería tenerse en cuenta en las próximas perspectivas. A diferencia de otras propuestas políticas como los recortes fiscales, los aranceles o la inmigración, parece existir cierto consenso entre los legisladores para prorrogar las medidas de apoyo ya en vigor. En consecuencia, es posible que los hogares y las empresas estén creando expectativas de una demanda más robusta y contraten más o no retraigan el consumo.
Nos sentimos respaldados en nuestra opinión de que la Fed señalará que necesita más tiempo antes de poder bajar los tipos hasta una postura neutral, que esperamos que se sitúe entre el 3% y el 3,5%. Como resultado, esperamos que el próximo Resumen de Proyecciones Económicas muestre un crecimiento robusto continuado en 2025, pero menos recortes de tipos a expensas de una inflación algo más alta. Desde nuestra perspectiva, ya hemos rebajado nuestra previsión de 5 a 3 recortes de tipos para finales de 2025, incluido el de diciembre. En cuanto a los tiempos, podríamos ver una Fed que pasará a los ajustes trimestrales en el primer semestre de 2025 antes de hacer una pausa en la normalización de la política en el segundo semestre.