SAN VICENTE DEL RASPEIG. El Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig ha tramitado una subvención europea para la creación de una zona de bajas emisiones (ZBE) en el casco histórico. El objetivo es la reducción de elementos contaminantes. La petición incluye la implantación de una nueva plataforma para la gestión de la movilidad, renovación del equipamiento en 31 cruces, creación de pasos de peatones inteligentes, un sistema de supervisión de la movilidad en tiempo real y la incorporación de tecnología para la gestión inteligente de los aparcamientos públicos.
Las concejalías de Medio Ambiente, Seguridad e Infraestructuras han tramitado esta solicitud europea que incluye una red de 8 sensores y medidores de la calidad del aire, del ruido, temperatura, humedad relativa y presión atmosférica de altas prestaciones, tanto en la ZBE como en las principales zonas de la ciudad. También se implantará un sistema de control de las infracciones y gestión de sanciones que facilitará a las autoridades locales la tramitación de las correspondientes multas. Para informar a la ciudadanía se instalarán 5 paneles de señalización variable en los principales accesos que permitirán mostrar información en tiempo real sobre la calidad del aire, restricciones, plazas de aparcamiento y estado del tráfico.
Los concejales Alberto Beviá y José Manuel Ferrándiz han informado de que la inversión total para estas iniciativas es de 2.897.490 euros, de los cuales 359.650 los aportaría el Ayuntamiento y 2.537.839, Europa, en caso de que se apruebe la memoria remitida. Lo regidores, que han felicitado al equipo técnico municipal que ha formalizado la solicitud de subvención, han asegurado que de obtenerse la ayuda europea, San Vicente dará un giro de 180 grados en cuanto a la reducción de contaminantes y gestión de la movilidad urbana, y avanzará en la humanización de la ciudad.
También se solicita a la UE una plataforma para la gestión de la movilidad, renovación del equipamiento en 31 cruces, incluyendo los reguladores, focos LED de bajo consumo, detectores, así como un conjunto de pasos de peatones inteligentes con señalización reforzada. En otro apartado se pide la mejora de los aparcamientos públicos con un sistema de gestión inteligente que dote de una alta calidad a la información al usuario y que faciliten el acceso a estos de las personas con movilidad reducida u otro tipo de discapacidad.
Otra iniciativa propuesta es la implantación en el Centro de Control de la Policía Local de una nueva plataforma de video vigilancia para la supervisión en tiempo real de la movilidad, con un conjunto de cámaras y lectura de matrículas en los principales accesos e intersecciones.