Durante el pleno del miércoles 29 de junioSAN VICENTE DEL RASPEIG. Las obras del pabellón polideportivo de San Vicente del Raspeig han sido objeto de debate en el pleno del miércoles 29 de junio. En concreto, el sobrecoste de 401.536 euros motivado por el aumento del precio de los materiales. Aprovechando esta revisión, se ha modificado el contrato actual para "dotarlo de mejoras", que repercuten en la eficiencia energética, reducción de gastos de mantenimiento y apuesta por un modelo de rendimiento para deportistas y sostenibilidad de las instalaciones, según ha explicado el concejal de Contratación, Guillermo García (PSOE).
Como ha apuntado el edil, estas modificaciones se mueven en el 5 % del total, cuando la normativa contempla la posibilidad de revisar hasta el 15 %. Con esta modificación se pretende adaptar las obras a una nueva situación económica y de mercado, derivada del incremento en el precio de los materiales de construcción y de la escasez de materias primas de "la obra más importante de la legislatura", ha tildado.
Uno de los dos socios de Gobierno del PSOE, Podemos, ha recordado que la revisión de precios solicitada por la mercantil en un principio ascendía a unos 700.000 euros, por lo que el portavoz de la formación morada, David Navarro, se congratula de que se haya podido rebajar dicha cantidad casi a la mitad, con las nuevas propuestas técnicas "que no afectan a la morfología del edificio proyectado ni disminuyen sus prestaciones".
Simulación del aspecto exterior del pabellón una vez finalizadoEl otro socio de gobierno, Esquerra Unida, ha optado por comparar los 14 años de gobierno municipal del PP, "donde solo hicieron el velódromo en cuanto a infraestructuras deportivas, el cual no es ejemplo ni de planificación ni de gestión que tanto pregona el Partido Popular". Y, en el otro lado de la balanza, Alberto Beviá, portavoz de EU, ha indicado que en siete años de gobierno progresista de izquierdas "hemos sido capaces de proyectar, presupuestar y licitar dos obras: el pabellón y la primera fase del centro del agua".
Ante esta apelación directa, el portavoz del PP, Óscar Lillo, ha defendido que tras siete años el pabellón todavía no existe y que las piscinas municipales llevan cerradas tres años. Ciñéndose al pabellón, ha sacado a la luz una sentencia del Tribunal de Justicia de la Comunitat Valenciana (TJCV) que trata sobre la "alegalidad" de la dirección facultativa, dándole porque la razón al recurrente, "con lo que, si la sentencia al final es firme, la dirección facultativa no es la que está autorizada ahora. Esperemos que el juez no dicte medidas cautelares y paralice la obra".
Por su parte, el portavoz de Compromís, Ramón Leyda, ha considerado como "indeseado" este aumento y ha presagiado que, "siendo optimistas, de aquí a tres años podrá estar listo el pabellón, porque la obra tiene un periodo de ejecución de unos 27 meses y se ha encontrado una serie de problemas". Y ha sido Pachi Pascual, portavoz de Ciudadanos, quien ha mostrado su "preocupación" por los futuros sobrecostes que se puedan dar en el proyecto.
El portavoz de Vox, Adrián García, ha manifestado sus "dudas" de que "este pabellón reúna las condiciones necesarias de abastecimiento tanto de los clubes como de los deportistas", también vaticinando que "puede que esta no sea la última modificación". El punto ha sido aprobado por los votos a favor del equipo de Gobierno (PSOE, EU y Podemos) y las abstenciones de la oposición (Compromís, Vox, PP y Cs).
