SANTA POLA. El pasado y el presente se dan la mano en la nueva exposición del Museo del Mar de Santa Pola, Re(d)inventar lo incontable, donde la artista contemporánea Luisa Pastor Mirambell se vale de antiguos objetos que deconstruye, recontextualiza y conecta a través del hilo, como si se tratase de una red de pesca con la que ha capturado momentos, contextos o esencias. Un proyecto comisariado por Estefanía Soler donde la creadora alicantina sigue dando continuidad a su obra global combinando esas piezas protagonizadas por objetos con otras que son elaboradas a partir de sus recurrentes cuadernos de contabilidad. Trabajo artístico que se inaugura este sábado, 25 de enero, a partid de las 19 horas, y que podrá visitarse hasta el 21 de abril.
La muestra es el resultado de la selección de la cuarta convocatoria pública internacional para la captación de proyectos expositivos. Un concurso en el que concurrieron más de 70 proyectos de todo el mundo y que contó con un tribunal de especialistas externos para seleccionar hasta cuatro proyectos que serán exhibidos durante todo el año. “Con esta exposición iniciamos la temporada expositiva”, destaca María José Cerdà, directora del Museo del Mar de Santa Pola.
De esta forma, Luisa Pastor presenta un universo de hilos y cuadernos de registro, dos elementos que, en su origen, pertenecen a mundos muy distintos: la pesca y la contabilidad. “Ambos, en su uso cotidiano, representan funciones específicas, pero en la exposición se despojan de su utilidad original para convertirse en vehículos de un discurso más amplio y abstracto”, afirma Estefanía Soler.
La exposición no solo se interesa por los objetos en sí, sino por la posibilidad de darles una nueva existencia a través de la manipulación y la recontextualización. “El hilo, que tradicionalmente conecta elementos tangibles en las redes de pesca, se convierte aquí en un símbolo de conexión entre el pasado y el presente, entre la memoria colectiva y la experiencia personal. Al igual que las redes, que atrapan lo que el mar ofrece, los hilos atrapan fragmentos de significados y recuerdos que se tejen en formas nuevas y diversas”, describe la comisaria de la muestra.
El hilo es un material que Luisa Pastor lleva usando muchos años. “Ya en la carrera, en el segundo curso de Bellas Artes, cuando empecé a trabajar con libros de contabilidad, usaba también el hilo”, recuerda la autora, quien recupera ahora algunos de aquellos trabajos, desde 2001, e incluso alguno más antiguo, donde este elemento conformaba su paleta de colores. “Me parece un material muy mágico a la hora de trabajar”, apunta.
Hilo y papel se convierten en los grandes protagonistas de la muestra para mostrar cómo un objeto puede reinventarse hasta mostrar su esencia. Las retículas de esas hojas de contabilidad donde se soportan las palabras y los números, las historias. Esas líneas, que son un soporte, se transforman hasta evidenciar la metamorfosis del papel en la obra de Luisa Pastor. “De ser un objeto que pasa desapercibido a ser el protagonista de la historia”, destaca la artista. Desde sus primeros dibujos, más inocentes, pasando por los primeros collages con objetos unidos por la incisión de la aguja y el hilo, hasta la deconstrucción total del papel. “El papel se convierte en hilo, la red se convierte en hilo, un hilo tensado que recorre la sala”, describe Pastor
“Esta es para mí una de las exposiciones más importantes que yo haya podido hacer”, sentencia Pastor. No es una retrospectiva, porque no aborda todas sus etapas y tampoco sus distintas técnicas empleadas a lo largo de su trayectoria. Sin embargo, a través de 84 piezas, la artista deja ver de sala en sala cómo sus inquietudes creativas han ido variando a lo largo del tiempo, hasta llegar a una pieza audiovisual de Isidro Sánchez donde la autora explica cómo se gesta una obra hasta exhibirse en una exposición como la que podrá visitar el público en el Museo del Mar.
“La exposición es un ejemplo de cómo el arte puede rescatar lo aparentemente insignificante, lo que ha caído en el olvido, para otorgarle una nueva relevancia”, afirma Estefanía Soler. Un trabajo donde se destaca la capacidad de la artista para trascender la materialidad de los objetos y guiar hacia una reflexión más profunda sobre la memoria, el tiempo y la identidad. “Los hilos y los cuadernos, aunque comunes y desechables en su vida cotidiana, se convierten en testimonios de historias no contadas, en universos infinitos que esperan ser descubiertos”, apunta la comisaria.
En este sentido, la obra de Pastor no solo es una invitación a mirar más allá de la superficie, sino también un desafío a nuestra forma de entender el valor de las cosas. “Al otorgarles un nuevo significado, la artista recuerda que lo incontable no solo reside en lo que no podemos medir, sino también en lo que hemos dejado atrás, en lo que hemos olvidado, y en lo que aún tiene el poder de transformarse y reinventarse”.
La sala, dependiente del Ayuntamiento de Santa Pola, pertenece a la red valenciana de museos y posee una naturaleza histórica, arqueológica, etnográfica y también artística, a través de estas convocatorias públicas y otras iniciativas como residencias de artistas “Estamos muy orgullosos de tener a una notable artista alicantina entre nosotros; nuestra política expositiva es muy plural e internacional, pero también damos voz y espacio a los notables artistas alicantinos que tenemos en nuestra tierra”, afirma la directora del museo. “Luisa Pastor, sin duda ninguna, es una de ellas, con una notable trayectoria y con una exposición que va a ser muy seductora, sutil y evocadora; va a ser una de las grandes exposiciones artísticas en la provincia en estos meses”, destaca María José Cerdà.