El presidente de la Generalitat en funciones, Ximo Puig. Foto: Diego Radamés/EPVALÈNCIA. La polémica por los plazos para la investidura de Carlos Mazón como presidente de la Generalitat sigue coleando conforme pasan los días y tiene visos de continuar haciéndolo hasta que no se clarifique la situación a lo largo de la próxima semana. El jefe del Consell en funciones, Ximo Puig, se abrió este viernes a acelerarlos "si se lo pide personalmente" el líder del PPCV. Los populares no descartan hacerlo.
Mazón dijo desde el primer momento que su prioridad era acelerar la investidura una vez ya anunciado el pacto con Vox, que firmó de manera exprés. Pero para ello debe respetar los tiempos establecidos en el reglamento de Les Corts. Desde la constitución del parlamento autonómico (lo cual tuvo lugar el pasado lunes 26 de junio) ocurren dos cuestiones: una, que los grupos tienen un plazo de ocho días hábiles para constituirse –la fecha límite es el próximo jueves 6 de julio–; dos, que los grupos cuentan con doce días hábiles para presentar candidatos a la Presidencia de la Generalitat. Transcurrido ese tiempo –o cuando ya exista comunicación por parte de los grupos de si presentan o no candidato–, la Presidencia de Les Corts, oída la Junta de Síndics, fijará la fecha de celebración del pleno de investidura entre los tres y los siete días siguientes.
Aquí, por lo tanto, resulta clave cuándo se registran los grupos, dado que el otro plazo es más flexible. Los populares y Vox ya lo han hecho, mientras Compromís lo hará el próximo lunes o martes, según confirman fuentes del partido. Los socialistas son los que se resisten a realizarlo antes del último día, por lo que los populares han criticado esta actitud por parte del presidente de la Generalitat, quien este viernes aseguró no sentirse aludido porque nadie se lo había trasladado directamente.
"Lo normal es que si el presidente del PP se reúne con el presidente de la Generalitat y quiere adelantar los plazos se lo diga. A mí no se me ha dicho nada. A través de los medios dentro de actos políticos del PP me lanzan mensajes. Yo no me doy por enterado. Pero estoy abierto. El señor Mazón tiene toda mi colaboración y mi cooperación. No entiendo que se quiera polemizar con cuestiones que se pueden acordar. Si se nos pide nosotros podemos, a partir del 6, acortar los plazos. Hasta el 6 nuestra acción política está determinada porque el día 5 tenemos la ejecutiva nacional del partido, que va a definir el grupo parlamentario y las áreas. Y el PP no va a marcar nuestra acción política", argumentó Puig este viernes.
El jefe del Consell en funciones, por lo tanto, se abrió a acelerar la investidura, pero siempre a partir del día 6 de julio. Es decir, que los socialistas no se plantean registrar antes el grupo, aunque se muestran abiertos a usar los resquicios que deje el Reglamento de Les Corts para la fijación del pleno de manera rápida en los días siguientes. Esto, realmente, sólo lo adelantaría entre dos y tres días según los cálculos del PP, por lo que se podría trasladar al 13 o 14 de julio.
En todo caso, y por si finalmente se usara esta vía, fuentes parlamentarias señalan que la nueva presidenta de Les Corts, Llanos Massó, tiene previsto convocar a los grupos a una reunión la próxima semana para, básicamente, escuchar sus posiciones sobre la investidura y comprobar que el PP sea el único que presente candidato. Desde el PSPV indican que, en principio, Puig no aspirará a ello.
Y con todo este dibujo encima de la mesa, ¿con qué escenarios juega Mazón? Si no puede ser investido la semana del 10 de julio, hay quien apunta que entonces la fecha idónea no sería la semana siguiente, que es la de la celebración de las elecciones generales, sino ya pasados los comicios. El motivo es que no le conviene esa imagen de desgaste de un pacto con Vox con todo lo que le podría afectar en un pleno –con comparecencias públicas de sus nuevos socios y con los ataques de la izquierda ante el acuerdo– y que a ello se añadiría la obligación de tener que conformar el Consell rápidamente.
No obstante, fuentes del PPCV insisten reiteradamente en que su absoluta prioridad a día de hoy es que la investidura sea "cuanto antes", aunque suponga que se celebre antes del 23J. De ahí que lleguen a asegurar que si Puig quiere que le pidan celeridad lo harán.
