ALICANTE. La Conselleria de Agua, Medio Ambiente, Infraestructuras y Transportes trata de poner en marcha las primeras actuaciones de mejora de la capacidad de tratamiento de aguas residuales contempladas en el plan 'Vertido 0' con la redacción de los proyectos de construcción definitivos a ejecutar en las estaciones depuradoras de Rincón de León y Monte Orgegia, en Alicante.
Fuentes del departamento autonómico que coordina Vicente Martínez Mus precisan, a consulta de Alicante Plaza, que se trata de introducir nuevos sistemas terciarios que afinen el caudal depurado para propiciar su desalación con el propósito de que puedan destinarse al riego agrícola. En esta línea, las dos intervenciones previstas en las plantas alicantinas que quedan bajo el impulso de la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar) parten con un presupuesto estimado de 25 millones, según las mismas fuentes.
Por ahora, no se ha precisado un posible calendario para su ejecución. En todo caso, su desarrollo continúa ligado a un acuerdo previo que corresponde adoptar bien al Ayuntamiento de Alicante, o bien a la Mancomunidad de l'Alacantí, según las mismas fuentes. Se trata de la cesión del suelo necesario en el entorno de las dos estaciones para que puedan desarrollarse las nuevas infraestructuras previstas en ese proyecto (balsas de filtraje, decantación y almacenamiento, entre otras).
Ese requisito supone que sea la administración local o la supramunicipal quienes deban promover posibles acuerdos de expropiación que resulten imprescindibles para dar cabida a esas instalaciones, en el supuesto de que no se disponga ya de terrenos suficientes. Lo cierto es que, hasta ahora, no se ha facilitado información detallada sobre qué superficie debe procurarse para su desarrollo. Y tampoco se ha concretado si se ha dado algún paso en la formalización de la entrega de esos suelos. De ahí que formaciones como Compromís hayan reclamado en distintas estancias que se aceleren los acuerdos previos necesarios para que puedan abordarse las distintas fases de obra de un plan con el que se pretende evitar el vertido al mar de 20 hectómetros cúbicos que pasarían a ser utilizados en el riego agrícola.
En todo caso, la implantación de esos sistemas de tratamiento terciario son un primer avance de un proyecto global para el que se estima una inversión de 340 millones, según el desglose facilitado por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), a través de una respuesta parlamentaria a la pregunta formulada por Compromís en el Congreso sobre el estado de desarrollo del plan Vertido 0.
En concreto, el conjunto de actuaciones prevista en la estación de Rincón de León requiere de un desembolso global de más de 168 millones (168.288.513 euros), mientras que las mejoras a introducir en la planta de Monte Orgegia supondrán un desembolso adicional de más de 171 millones (171.406.522 euros).
El conjunto de infraestructuras previstas en esa segunda estación quedará financiada íntegramente por el Gobierno central, a través del Ministerio para la Transición Ecológica y de la empresa pública Acuamed, en función del acuerdo aprobado por el Consejo de Ministros el pasado 9 de julio, según concreta la CHJ en la misma respuesta parlamentaria. Todo, después de que el coste de esa batería de mejoras haya quedado comprometido con cargo al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR).