El alcalde, Luis Barcala (PP), y la vicealcaldesa, Mari Carmen Sánchez (Cs), tras firmar el pacto de gobierno. Foto: RAFA MOLINA ALICANTE. Cerca de un mes y medio después de la presentación de peticiones por parte de cada concejalía, Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs) dan prácticamente por cerrada la confección de su primer presupuesto en común para el ejercicio de 2020, que ascenderá a unos 260 millones (tres más respecto a los del ejercicio precedente). Los dos partidos aliados al frente del Ayuntamiento de Alicante deben abordar ahora las últimas reuniones de carácter técnico -como la celebrada este mismo lunes- para cuadrar las últimas cifras de detalle. Sobre todo por lo que respecta al gasto corriente (dinero comprometido), con el fin de dar cobertura a los servicios que dependen de cada área sin desatender otros, según las fuentes consultadas.
Las mismas fuentes precisaron que, salvo en los encuentros iniciales, en los que Cs tuvo que reclamar mayor consignación presupuestaria en varias partidas (no solo las que afectaban a sus concejalías), la negociación se habría producido en un clima de entendimiento para garantizar las necesidades de cada parcela, pese a que en el proceso también se habría tenido que superar ciertas desconfianzas sobre el cumplimiento de determinados compromisos.
Como adelantó Alicante Plaza, en el transcurso de las conversaciones también se puso sobre la mesa la exigencia de que se produjese un refuerzo en personal, de modo que existiesen técnicos suficientes para poder ejecutar las cantidades presupuestadas. El acuerdo sobre dicho refuerzo también se habría conseguido cuadrar con la contratación de técnicos adscritos a varios departamentos, al margen de la ampliación de la plantilla de conserjes y de agentes de Policía Local.
El bipartito prevé aprobar las cuentas en Junta de Gobierno antes del cierre del año aunque no hay fecha concreta para elevarlas a pleno
Los números correspondientes al capítulo de inversiones se fijaron a mediados del mes de noviembre sin que, según las fuentes consultadas, se haya producido ninguna variación significativa. Así, se prevé ejecutar proyectos municipales por un importe de 21 millones. Hasta el momento, no ha trascendido de qué iniciativas concretas se trata, salvo la obra anunciada en el pleno ordinario de noviembre para dar un uso provisional a los terrenos liberados de las vías de ferrocarril y favorecer la comunicación entre barrios. Además, también se viene reiterando que se desarrollarán las obras comprometidas en la negociación del presupuesto de 2019 que no se han podido ejecutar hasta ahora como inversiones financieramente sostenibles.
Otra de las incógnitas por resolver sigue siendo la fecha en la que se prevé elevar la propuesta presupuestaria a la consideración del pleno de la corporación. Las fuentes consultadas indicaron que, como mínimo, se espera que las cuentas puedan quedar aprobadas en Junta de Gobierno antes de que termine el año, lo que aplazaría la fase de negociación política con los grupos de la oposición al próximo mes de enero. Así, el acuerdo podría votarse en el pleno ordinario de ese mismo mes. Por lo pronto, se da prácticamente por descartado la posibilidad de que la propuesta se pueda debatir en el pleno ordinario de diciembre que, salvo cambio de última hora, se celebrará el próximo jueves día 19.
