ALICANTE. El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante, del Partido Popular (PP), trata de engrasar un nuevo pacto presupuestario con Vox que permita aprobar la planificación económica de 2025 con la materialización de varios de los acuerdos incluidos en el acuerdo alcanzado respecto a las cuentas de este año a los que todavía no se había dado cumplimiento. Se trata de la apertura de una oficina de apoyo a la maternidad y otra de asistencia frente a casos de ocupación ilegal de viviendas.
La primera debería ponerse en funcionamiento el próximo miércoles, 20 de noviembre, en dependencias habilitadas por la Concejalía de Bienestar Social en el Casco Antiguo. Y la segunda se prevé activar el día 26, en las instalaciones de la Jefatura de Policía Local situadas en la avenida Julián Besteiro. Así se puso de manifiesto en la reunión de seguimiento del pacto presupuestario celebrada este viernes entre representantes del equipo de gobierno y ediles de Vox para concretar los avances en la ejecución de los compromisos asumidos el pasado mes de enero.
Pero no solo eso. En esa cita, también se concretó que también se estaba trabajando en la puesta en marcha de otra oficina de asistencia al cuidador y que ya se había perfilado la programación para conmemorar el 4 de diciembre, día de Santa Bárbara, como fecha de la reconquista de Alicante, con actividades específicas a desarrollar en el Castillo.
En realidad, se trataría de algunos de los últimos puntos del acuerdo bilateral registrado entre los dos partidos a los que todavía no se había dado curso. El resto de compromisos estarían ya ejecutados (como la aprobación de la ordenanza de la Zona de Bajas Emisiones sin nuevas restricciones, o la instalación de surtidores de agua refrigerada en la vía pública, por ejemplo), o en trámite (como los estudios para la implantación de sombrajes en calles comerciales). De hecho, prácticamente solo quedaría por materializarse la tramitación de una ordenanza reguladora específica sobre el funcionamiento de los mercadillos, según precisaron fuentes consultadas.
No obstante, hasta el momento no se habría registrado ningún avance en la negociación de un hipotético segundo acuerdo respecto a las cuentas de 2025. La posición de Vox continúa siendo inamovible: no se llegará a un entendimiento que pueda abrir esa negociación hasta que no se ejecuten los últimos compromisos pendientes. Y no se aceptará un acto de fe, sino actos constatables.
De hecho, según las mismas fuentes, no se habría llegado a plantear ningún avance adicional respecto al presupuesto trazado por el PP para el próximo ejercicio al margen de la información que se facilitó al conjunto de los grupos opositores en una primera ronda de reuniones desarrollada a finales de septiembre, en las que se les dio a conocer solo algunos detalles sobre sus líneas centrales, sin facilitarles desgloses pormenorizados sobre los que poder plantear propuestas.
Entonces, solo se adelantó que las cuentas ascenderían a 349,1 millones y que se contemplarían 25,5 destinados a inversiones, entre las que figurarían las contempladas en el plan plurianual aprobado en 2024, ya iniciadas o en fase de contratación. Se trata de actuaciones como la reurbanización de la avenida de Niza, el nuevo pabellón de Tómbola o la ampliación del cementerio, por ejemplo.
Sea como fuere, el equipo de gobierno ya ha manifestado que su voluntad es acelerar el cumplimiento de todos los acuerdos pactados con Vox con el propósito de poder jugar la baza de forjar una nueva alianza presupuestaria que garantice la aprobación de las próximas cuentas, en el supuesto de que no se pueda sumar el apoyo de ningún otro grupo político de la oposición.