Pacheta se resiste a cambiar ya de objetivo

ELCHE. "Estamos en un momento bueno, somos un rival peligroso para el contrario", decía José Rojo 'Pacheta' minutos después del triunfo de los suyos sobre el Córdoba gracias a un gol de Nino al cuarto de hora, pero en un partido en el que el Elche hizo méritos para una victoria mucho más holgada.

"Hemos hecho un gran partido y solo nos ha faltado más acierto de cara a gol (...) llevábamos varias semanas diciendo que estábamos ajustando muy bien en defensa y que lo que antes era un drama como la estrategia defensiva o el manejo de los tiempos ya no lo es (...) hemos crecido mucho", señalaba el técnico franjiverde para a continuación enumerar las virtudes que habían sacado a reflejar los suyos en el choque: "Mucha fluidez, sabido aprovechar los desmarques a la espalda, contactado muy bien por dentro con Nino y Javi (...) Iván nos da mucha pausa y Karim una marcha más", decía Pacheta que incidía en que "ganar, aunque sea por la mínima, da mucha confianza" y de ahí que "lo que antes nos preocupaba, a base de victorias, se ha ido yendo".

La tercera victoria consecutiva (cuarta ante su público) deja al equipo franjiverde como undécimo con 45 puntos, 12 por encima del descenso, cuando restan por disputarse nueve partidos, si embargo el preparador burgalés se resiste a cambiar ya de objetivo: " No le voy a quitar la ilusión a nadie, pero hasta que no tenga 48 puntos no cambio el objetivo", decía el entrenador franjiverde que insistía en que seguían a 12 del descenso y recordaba que, como había apuntado ya en la previa del encuentro, hasta que esa diferencia no fuera de 15 puntos no iba a dejar de pensar en la permanencia.

Respecto a las lesiones, Pacheta apuntaba que Iván Sánchez sufría una sobrecarga en los isquios y que Nacho Gil, que precisamente le había sustituido, parecía que podía sufrir una rotura de fibras. El técnico se deshizo en elogios hacia el valenciano del que dijo que lo había dado todo en Las Palmas, que no merecía salir del once y que se había lesionado precisamente en una acción en la que solo él demostró confianza suficiente para pelear el esférico, rompiéndose en ese esfuerzo. "Llevaba mucho tiempo sin jugar (...) vamos a ver qué dicen las pruebas", señalaba Pacheta.