ALICANTE. El cruce de declaraciones del martes entre el alcalde Luis Barcala y el empresario Enrique Ortiz a cuenta del Hércules parece que tendrá continuidad con un cara a cara en el consistorio. Todavía se desconoce si será antes de la manifestación del domingo convocada por varios colectivos de aficionados o después, pero el caso es que Ortiz solicitaba la mañana del miércoles al primer edil una reunión para abordar la situación del club.
La postura del dueño 'de facto' del club del Rico Pérez sigue siendo la de su comunicado del martes: conciliadora. La del primer edil, en principio, también va en la misma línea, todo y la airada crítica que hizo la mañana del martes "a directivos y propietarios" del Hércules, solo horas antes de reunirse (junto a miembros de todos los partidos) con aficionados críticos con Ortiz en el consistorio. Entre las declaraciones de la mañana de Barcala y la reunión de la tarde terció el empresario por medio de un comunicado en el que pedía ayuda al primer edil para recuperar "la credibilidad perdida", pero "sumando y no dividiendo".
En el pleno municipal de este jueves se votará una declaración institucional de todos los partidos "emplazando a los dueños del Hércules a contar con la afición para buscar soluciones", al tiempo que está prevista la intervención de un representante de la Asociación Herculanos.