Recreación del futuro centro de interpretación del Palmeral de Orihuela. Foto: APORIHUELA. El tiempo corría en contra del Ayuntamiento de Orihuela. 4 de mayo, fecha límite. El plazo para finalizar -aun no han empezado- las obras de rehabilitación, conservación y puesta en valor integral (Patrimonio histórico, etnológico ehidráulico tradicional) del Palmeral de San Antón de Orihuela debían concluir en la primera semana de mayo como condición para disponer de la subvención de la Generalitat Valenciana. Con la llegada de la pandemia, la declaración del estado de alarma y con éste la suspensión de los plazos administrativos han sido los elementos que permitirán al consistorio contar con los 332.000 euros de los fondos FEDER.
El Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) del martes recogía la resolución de Presidencia en la que se anunciaba que "con el fin de paliar las consecuencias del impacto de la covid-19, se amplía el plazo máximo de ejecución y pago de los proyectos locales de actuación de las entidades locales para la protección, conservación o recuperación sobre bienes de patrimonio cultural valenciano y su puesta en valor, susceptibles de cofinanciación por el programa FEDER de la Comunitat Valenciana 20147-2020". Ésta la traslada al 4 de noviembre de 2020.
De no haberse dado esta ampliación, el consistorio no hubiera alcanzado el 4 de mayo para disponer de los fondos FEDER. El 4 de febrero, la Junta de Gobierno aprobaba la compra de la Casa de los Verdú, dentro del Palmeral, para destinarla al Centro de Interpretación. Conselleria no permitía que el proyecto recogiera una nueva construcción, por lo que era un requisito indispensable la compra de una vivienda. El 28 de febrero, en sesión extraordinaria, la Junta de Gobierno aprobaba el procedimiento de licitación para llevar a cabo las obras. En cuanto a las condiciones, el importe máximo de licitación ascendía a 810.000 euros (IVA incluido) y un plazo máximo de ejecución de cinco meses. El 3 de marzo se abría el plazo de presentación de ofertas. Por delante quedaba el plazo de licitación, la adjudicación, la firma del acta de replanteo y concluir con unas obras a las que se les habían asociado cinco meses. Todo ello en dos meses y una semana.
Los trámites administrativos no se paralizaron hasta el 14 de marzo, cuando el gobierno central declara el estado de alarma por la pandemia de la covid-19. Un día antes, el día 13, concluyó el plazo de presentación de candidaturas. El 28 de abril, el consistorio anuncia que se han adjudicado las obras a la mercantil Lorquimur S. L., por 674.775 euros. Además, uno de los elementos mejor valorados, según fuentes del consistorio, era la bajada de plazo de ejecucicón de las obras, de cinco a dos meses. Siete días restaban para la finalización del plazo.
En reuniones mantenidas entre el consistorio y el Consell, se le trasladó la duda en cuanto a qué sucederá con el plazo de finalización de las obras, dadas las circunstancias. Desde el Consell, según señalan desde el equipo de gobierno oriolano, les admitierion que estaban valorando la opción de la prórroga.
El concejal de Patrimonio, Rafal Almagro, ha asegurado que las obras comenzarán la semana que viene. El contrato ya está firmado y solo falta la firma del Plan de Seguridad y Salud Laboral. Aunque el plazo se haya ampliado hasta noviembre, no condiciona los dos meses que se fijaron para concluir las obras y con la que se consiguió la licitación.
No es la primera ampliación que concede el Consell de forma genérica. El 19 de septiembre, el alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, solicitó por escrito una prórroga dado que el Palmeral se encontraba completamente anegado de agua y por tanto con la "imposibilidad todavía ni evaluar los daños y menos, llevar a cabo las actuaciones" debido a las inundaciones que provocó la DANA cinco días atrás. El plazo concluía en octubre. El director general de la Administración Local de la Generalitat Valenciana le comunicó también por vía escrita que se establecía una prórroga hasta el 4 de mayo.
En cuanto a los trabajos que se van a realizar para poner en valor este Bien de Interés Cultural destaca la urbanización de itinerarios que favorezcan una accesibilidad sostenible del espacio físico de acogida, restauración de elementos del patrimonio cultural y etnológico, elementos de la red hidráulica interior, elementos paisajísticos y ambientales más valiosos e incorporación de equipamientos.
Recreación del acueducto. Foto: APTambién se llevará a cabo el acondicionamiento para su conversión en un Centro de Interpretación del paraje, la Casa de los Verdú. Está situada en la avenida Dr. García Rogel y cuenta con una superificie útil de 114’46 m², con una parcela de 159 m² y una área ajardinada adjunta.
El proyecto tambén incluye el acondicionamiento de unos 17.000 metros cuadrados de caminos interiores en el entorno de El Palmeral y la construcción de nuevas aceras, nueva señalética, mobiliario, así como un circuito interior ciclo turístico, además de la recuperación del riego tradicional, y la restauración de elementos paisajísticos ambientales, como son la recuperación de muros de mampostería, o el vallado de caña tradicional en diferentes zonas.
