ELCHE. Entrado el último trimestre del año, el equipo de gobierno esprinta para tener todo listo de cara al próximo mes de noviembre, en el que a priori estará finalizada la peatonalización de la Plaça de Baix, ya que la Corredora está finalizando, de hecho se prevé abrir oficialmente a los viandantes este viernes. Después de los duros meses de confinamiento y una pandemia que aún sigue repercutiendo en una bajada del consumo, el bipartito espera poder reactivar el sector comercial en el Centro, que lleva tiempo en declive, y con la presión de que los comerciantes piden actuaciones que fomenten el consumo. De momento, la fecha clave que se ha marcado es la del Black Friday, 27 de noviembre. En ella debería estar todo listo para impulsar diversas campañas que dinamicen la zona.
Presumiblemente para esta fecha la actuación de Corredora y Plaça de Baix estará finalizada, ya que esta última es la parte más costosa, al tener que instalar más de 600.000 piezas de mármol con motivos íberos en homenaje a vasijas de La Alcudia. En teoría, debe estar listo a mitad de noviembre y los plazos se están cumpliendo. Dos semanas después, a partir de ese día 27, empezará un concurso de escaparatismo impulsado por la concejalía de Comercio con la intención de que la decoración navideña no esté únicamente en la calle, "sino también, de manera especial, en los establecimientos comerciales", tal y como asegura el edil de Comercio, Felip Sánchez.
Peatonalización, luces navideñas, concurso de escaparates y actividades lúdicas
Desde el punto de vista de la concejalía, el concurso actuará de incentivo para el sector con el fin de crear ambiente navideño, y a ello contribuirá también la iluminación navideña, que contará este año con más inversión y mayor número de calles. A la inversión de más de 60.000€ que va realizar la concejalía de Fiestas en iluminación navideña, se une en esta ocasión una inyección económica añadida de 38.000 euros de la concejalía de Comercio para aumentar el número de calles incluidas. Se prevé el tradicional encendido a finales de noviembre o principios de diciembre y hasta el 6 de enero. El proyecto está en licitación y el con él se van a ampliar las calles, tanto para el centro histórico como para los barrios, esperando que animen a consumir.
Al tiempo, desde Comercio se ha acordado poner en marcha "una potente campaña de promoción, no sólo en los medios locales, sino también en los municipios colindantes, con el fin de que la ciudad ejerza como polo de atracción comercial en sus áreas de influencia natural". El Ayuntamiento quiere favorecer que Elche sea un punto de referencia comercial para los ilicitanos y para los municipios de nuestra área de influencia, "porque queremos atraer consumidores de ese entorno comercial”.
Por último, durante la campaña navideña, según se acordó en el Consell de Desenvolupament Comercial, se pondrá en marcha actividades de animación callejera para incentivar la actividad comercial. Según el alcalde, “serán actividades compatibles con la situación sanitaria que vive la ciudad, una animación comercial que será un estímulo para la actividad del comercio, pero siempre en ese marco de precaución, prevención y cumplimiento de las normas sanitarias".
El comercio, a la espera de que la campaña navideña salve los muebles
Este es por tanto el primer pack de medidas comerciales a corto plazo, ya para la campaña navideña. Incentivar el consumo mediante el tradicional encendido de luces, concurso de escaparates y actividades de animación, factores que se sumarán al habitual tirón del Black Friday y sobre el papel, de la peatonalización de la Corredora. Algo con lo que cuentan los comerciantes al menos a corto plazo, que por otra parte, a través de Aesec y el Colectivo Hostelería, que advirtieron de un duro golpe si no se acaban ciertas restricciones, y como propusieron en su momento Aete,pidieron un bono de consumo municipal para gastar en establecimientos y que no se ha aprobado. En cualquier caso quedará ver el impacto de estas actuaciones en la misma Corredora, la que más cierres ha vivido en los últimos tiempos; apenas hay tiendas de moda, la mayoría son comercios muy específicos de audífonos u ópticas, al menos en la parte entre Plaça de Baix y Glorieta.
Obras de la Corredora en septiembre / RAFA MOLINA
