Nueva Ley de familias: rectificar es de sabios

El Consejo de Ministros aprobó esta semana el Proyecto de Ley de familias, heredada del Ministerio de Asuntos Sociales anterior, con Ione Belarra a la cabeza. Los motivos y el interés en aprobar este proyecto de ley son, sin duda , loables: mejorar la vida de más de 1 millón  de familias y adaptar la legalidad a la diversidad de situaciones familiares en una sociedad cambiante. Sin embargo, no se sabe por qué, si por un olvido amnésico o por alguna razón desconocida, hay un grupo de familias que queda fuera del paraguas de refuerzo de protección legal: las familias monoparentales de un solo hijo, que representan el 70% de las familias monoparentales española. ¿La razón? Desconocida.

El tema es el siguiente: las familias monoparentales son nombradas en este proyecto de ley en varias ocasiones y, tengan un hijo o más, tienen derecho a solicitar ciertas prestaciones y un carnet de monoparentalidad que les otorgará algunos beneficios. Hasta ahí, vamos bien. Sin embargo, deja en un inconcreto futurible las medidas que garantizarán los derechos de las familias con un solo progenitor/a para afrontar situaciones difíciles en el futuro. El verdadero problema se plantea el el capítulo II cuando se incluye solo a las familias monoparentales que tengan dos o más hijos, junto a las familias numerosas en un grupo llamado familias con mayores necesidades de apoyo a la crianza. Este grupo gozará de mayores beneficios tanto de la Seguridad social como de la Hacienda pública. Y esto es lo que le duele a las familias monoparentales de un solo hijo. ¿Acaso no tienen también mayores necesidades de apoyo a la crianza? ¿No estaríamos ante un agravio comparativo y una vulneración del articulo 14 de la CE y 39 de la CE, que insta a los poderes públicos a proteger a toda clase de familias? ¿No quedarían las familias monoparentales divididas en aquellas protegidas y reforzadas por ley para gozar de los beneficios de las familias numerosas y aquellas que quedan fuera de beneficios y deducciones y sujetas a inconcretas medidas futuras por tener un solo hijo?

La realidad es dura y los números no mienten. Según el INE en 2023, hay 2 millones de familias monoparentales en España, de las que el 81% encabezadas por una mujer y el 53% se encuentra en riesgo de pobreza. Es preciso legislar bien, sin prisas y escuchando a las asociaciones implicadas, sino queremos arrepentirnos de las consecuencias en el futuro. La buena noticia es que estamos a tiempo, que es posible enmendar este olvido e incluirnos en las familias con mayor necesidad de apoyo a la crianza y aprobar una ley más justa. Las necesidades y problemas a los que se enfrenta una familia monoparental no son las mismas que las las familias numerosas, aunque haya puntos en común. Y aunque esta ley tiene una buena voluntad y avanza en derechos fundamentales, en permisos y protección para las familias, hay que legislar para todas las familias monoparentales por igual por equidad y sentido común. No se trata solo de nuestros derechos humanos básicos, sino de justicia, tanto para nuestras familias, como para nuestros hijos.

Lupe Bohorques es profesora titular de Derechos Humanos en la Universidad Europea de Valencia.