ALICANTE. La firma alicantina Muñecas Antonio Juan ha llevado a cabo una importante restructuración de las principales áreas de la empresa, que le ha permitido incrementar su presencia en los mercados internacionales, pasando del 10% de su producción en 2019 al 40% en 2022. En paralelo, ha ampliado la capacidad de sus instalaciones para absorber ese 30% de incremento para la exportación.
Para gestionar esta importante transformación, la compañía ha contado con la empresa AMG Interim Managers, según ha informado la empresa en un comunicado, a través de la dirección interina de uno de sus profesionales, Francisco Bautista, conocedor de la realidad y trayectoria del sector del juguete en la comarca.
La empresa, con más de 60 años de historia, ha llegado a estar presente en más de 50 países en los cinco continentes desde su sede en Onil. Esta visión de los hermanos Marco, Darío y Teresa Juan, la tercera generación de una misma familia al frente de Muñecas Antonio Juan, ha ido marcando la evolución reciente de la empresa y posicionamiento en el sector, sin perder su filosofía de marca: fabricar muñecas de calidad bajo el principio de la sostenibilidad.
La nueva planta de la empresa en Onil ha incrementado su capacidad de fabricación hasta un 30% y que ha permitido absorber su crecimiento tanto en el mercado nacional como el internacional. Para gestionar esta transformación y facilitar el acceso a la empresa de nuevo talento directivo, la compañía ha tenido el apoyo de AMG Interim Managers, a través de uno de sus profesionales, Francisco Bautista, familiarizado con el sector del juguete.
Según explica Teresa Juan, "teníamos muy claro hacia dónde queríamos ir pero nos dimos cuenta de que para ello necesitábamos dar un salto, no solo en infraestructura, sino a nivel interno, con metodologías innovadoras de trabajo que de verdad propiciaran la transformación que queríamos ver".
Tras realizar un diagnóstico del punto de partida y objetivos de la empresa, se establece un plan de trabajo, que se ha desarrollado a lo largo de dos años, con el que se lleva a cabo una completa restructuración interna. Un proceso que empieza por los departamentos clave de la empresa como el de Ventas, Producción, Administración y Marketing. El proceso tuvo que lidiar, como en muchas otras empresas, con la crisis sobrevenida por la Covid19. Muñecas Antonio Juan consiguió atenuar el impacto manteniendo resultados en 2020 y un crecimiento superior al 15% en 2021.
Al mismo tiempo, se inicia la puesta en marcha del nuevo ERP que desde Muñecas Antonio Juan se había estado estudiando para conseguir un mejor control de las operaciones. Según explica Francisco Bautista, hacer posibles todos estos cambios, implica también una mayor profesionalización y mejora de los sistemas de coordinación y dirección, "lo que se traduce en un importante cambio cultural y organizativo, con el que se consigue mejorar el desempeño de las funciones de los diferentes departamentos".
Estos dos años de transformación han supuesto para Muñecas Antonio Juan una reestructuración de su equipo, la consolidación de una estructura directiva y la profesionalización de áreas clave como Ventas, Administración, Producción y Marketing. Estos cambios permiten un mejor sistema de planificación, producción y plazos de entrega, además de un mejor aprovechamiento comercial de su capacidad productiva.
Muñecas Antonio Juan nace en 1958, en la localidad de Onil, en Alicante, cuna de la industria juguetera española desde finales del siglo XIX. Una empresa familiar, especializada en la fabricación de muñecas bebés y convertida hoy en referente mundial bajo los principios de calidad, tradición y sostenibilidad. Su compromiso con el cambio climático le ha valido la certificación Zero Waste, por conseguir reutilizar el 98% de sus desperdicios.