VALÈNCIA (EFE). La Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio ha mejorado las poblaciones amenazadas de anfibios, como el gallipato, en el Parque Natural de Sierra Calderona, gracias a los trabajos de conservación de fauna que se llevan a cabo a través del Centro Acuícola de El Palmar (CAEP).
El director general de Medio Natural y Animal, Raúl Mérida, ha destacado el trabajo del servicio de conservación de especies amenazadas de fauna y flora acuática de la Comunitat, que se enmarca en el Plan de Mejora de las poblaciones de anfibios del Parque Natural de la Sierra Calderona.
En concreto, Mérida ha explicado que el personal del Parque Natural de la Sierra Calderona ha llevado a cabo el inventario de puntos de agua de su territorio, para seleccionar los enclaves en los que liberar a los anfibios, que se crían en las instalaciones del CAEP, según informa la Generalitat.
Un total de 374 ejemplares de gallipato u "ofegabous" (Pleurodeles waltl) y más 40 sapos de espuelas (Pelobates cultripes) se han liberado durante los últimos tres años en Sierra Calderona.
El informe de la Conselleria de Medio Ambiente ha constatado también que ambas especies amenazadas se han reproducido ya, en al menos seis puntos dentro del parque natural, "lo que significa un gran éxito para el proyecto, que espera continuar en los próximos años", ha añadido el director general.
"Hemos conseguido aumentar la riqueza de fauna de este emblemático parque natural, puesto que no solo hemos introducido especies amenazadas como el gallipato en sus charcas y abrevaderos, sino que, además, hemos implicado a la población local", ha señalado Mérida.
Para el director general, "la implicación de las sociedades de cazadores, agricultores, ganaderos, ayuntamientos y asociaciones ecologistas es fundamental en este tipo de proyectos, pues toda la fauna se ve beneficiada de la creación de puntos de agua cuando el abandono del pastoreo ha hecho que muchos de estos puntos desaparezcan".
Además, la Fundación Oceanogràfic ha colaborado en este proyecto con el marcado con chip de muchos de los ejemplares liberados para comprobar cómo se adaptan estos animales a su nuevo hábitat y documentar su crecimiento y longevidad.