ALCOY. Si hay una procesión tradicional y única en Alcoy esa es la del Domingo de Pascua a primera hora: la Procesión del Encuentro, en la que la imagen de la Virgen María es llevada en carrera hasta el punto en que se encuentra la del Cristo Resucitado. Esta procesión se conoce también con el nombre de ‘Processó dels xiulitets’, debido a que el público acompaña la carrera de la Virgen soplando unos pequeños botijos de arcilla, que al llenarse de agua producen una especie de silbido.
Este año, por primera vez, el Ayuntamiento ha sacado a licitación la elaboración de estos ‘xiulitets’, puesto que se trata de un servicio recurrente, y se ha adjudicado a la única oferta presentada, la que procede de José Ángel Boix Martínez, de Agost. Tal y como recoge la propia empresa, la Alfarería Severino Boix es una de las que desciende directamente de la artesanía tradicional agostense. El actual maestro artesano, José Ángel Boix, es ya la quinta generación. Estos ‘xiulitets’ ya venían elaborándose en Agost y ahora se ha procedido a la adjudicación.
El contrato cuenta con un presupuesto de 6.050,00 euros, IVA incluido, al año y cabe la posibilidad de un máximo de tres prórrogas de un año cada una. Anualmente el Ayuntamiento necesita 2.000 unidades, para repartir entre el público que asiste a la Procesión del Encuentro, y la adjudicataria ha ofrecido una mejora que supone aumentar en 200 unidades esa cifra.
Cuando los botijos estén a punto y en manos del Ayuntamiento, seguirán siendo rotulados por los alumnos del centro ocupacional Gormaget, al que acuden personas con discapacidad intelectual.