ALICANTE. La tangana que llevó a que el choque del Eón Horneo Alicante del pasado domingo en Sarrià de Ter estuviera suspendido por espacio de media hora ha dejado, por el momento, una lluvia de suspensiones cautelares "a la espera de resolver las sanciones que corresponden (...) por la comisión de infracciones que, indiciariamente, han ocurrido a partir del minuto 57 de partido y los posteriores incidentes que implicaron la interrupción del encuentro".
Así versa la resolución del Comité de Competición de la Real Federación Española de Balonmano, que ha suspendido cautelarmente al técnico Óscar Gutiérrez, al portero Kiko Padilla, al lateral Juande Linares y al primera línea Enrique Moreno por parte del Balonmano Eón y al lateral Josep Ballester y al extremo Guillem Lozano por el Unió Esportiva Sarrià.
Además, el club gerundense ve también clausurado cautelarmente su terreno de juego, un Pavelló de Sarrià donde el pasado sábado, en el minuto 57 del partido que protagonizaban el Sarrià y el Eón, correspondiente a la jornada 6 de la primera fase en el grupo B de la División de Honor Plata, se desencadenó una bronca en la que participaron ambos conjuntos y parte del público. Una vez se calmaron los ánimos (algo a lo que contribuyó la presencia los Mossos d'Esquadra), se puedo retomar el choque, finalizando este con victoria alicantina (33-34).
Tras el choque, ambos conjuntos condenaron los hechos, si bien discreparon abiertamente sobre las causas.
Recursos
El Eón ha recurrido las citadas sanciones ante el Comité de Apelación, al tiempo que solicitado la adopción de medidas provisionales como la suspensión de la eficacia de las mismas con la finalidad de que tanto el técnico como los jugadores afectados puedan participar en el choque de este sábado (18:30 horas) en Puerto de Sagunto ante el Fertiberia. A primera hora de la tarde del viernes no había recibido respuesta.