ALICANTE. El PSOE de Alicante se adentra en la preparación de su asamblea local para renovar la composición de su ejecutiva. La cita debe celebrarse antes del mes de mayo, en función del calendario delimitado por la dirección autonómica del partido. Y, en principio, todo parece apuntar que podría desarrollarse una vez superados los días festivos de Semana Santa. Previsiblemente, antes de la Romería de Santa Faz, el próximo 28 de abril o, como muy tarde, el sábado posterior, día 30.
Al cónclave se llega con una primera incógnita despejada: la intención de revalidar el cargo durante otros cuatro años más por parte de su secretario general actual, Miguel Millana, como anticipó este diario. Para ello, podría contar con el respaldo mayoritario de la agrupación, alineada en torno al exsenador Ángel Franco, que entre sus afines se sigue cifrando en cerca de un 70% de los militantes.
Por el momento, no se ha postulado ningún hipotético candidato alternativo que pudiese surgir de cualquiera de las corrientes restantes que conviven en la agrupación, entre las que figuraría el sector alineado en torno al nuevo secretario provincial, Alejandro Soler, en el que se incluiría a los que hasta ahora se ha venido identificando como sanchistas. De hecho, puede que no lleguen a registrarse nuevos aspirantes. Como mínimo, ya se han iniciado contactos con la pretensión de llegar a un acuerdo de integración que evite confrontaciones como la que sí se registró en 2018, entre Millana y José Miguel González Moreno como candidato sustentado por el sanchismo.
Según fuentes consultadas, el objetivo perseguido en esa negociación es dar cabida a todas las sensibilidades con la representatividad que les corresponde, de modo que pueda cuadrarse una ejecutiva formada por miembros de todas las afinidades. Así, por ahora, el punto de partida del debate es cuál puede ser el reparto de porcentajes a asumir por ambas partes. En principio, el sector vinculado a Soler podría llegar a reivindicar entre el 40 y el 45% de los apoyos de la agrupación después de la evolución de las últimas citas congresuales y de que se hayan registrado algunos reposicionamientos clave entre algunas de las familias que venían posicionándose tradicionalmente junto a Franco.
En esta línea, la corriente liderada por el exsenador y Millana habría anticipado su predisposición a aplicar "generosidad" en la composición de la nueva dirección local. Sin embargo, las conversaciones no han hecho más que comenzar y ya se han concertado nuevas entrevistas para profundizar en el diálogo en busca de vías de un entendimiento definitivo. Eso sí, entre los soleristas no se da por descartada la posibilidad de lanzar un candidato propio a la secretaría general para volver a medir fuerzas en el caso de que no fuese posible un acuerdo satisfactorio. De hecho, ya se habría sondeado incluso la opción de promocionar a una candidata como alternativa a Millana en el caso de que finalmente resultase necesario.