ELCHE. Según las previsiones de Asaja en la tradicional presentación de la temporada de invierno, las altas temperaturas auguran una caída del 6% de la producción de hortalizas de invierno del municipio debido a las altas e inusuales temperaturas que estamos viviendo estas últimas semanas.
La asociación agraria, estima una producción de 18.000 toneladas y una superficie de cultivo que se mantiene en las 1.300 hectáreas. “Una producción que hay que tildar de casi milagrosa debido a los problemas de agua que tenemos en la zona y que hay que agradecer a la excelente utilización del regadío que se hace en el campo de Elche” ha subrayado el alcalde que ha estado presente en el acto. Eso sí, ha recalcado que la merma en la producción no va a afectar en ningún caso a la excelente calidad de las hortalizas cosechadas.
Concretamente para la campaña 2023-2024, el Camp d’Elx espera recolectar 9.000.000 de kilos de alcachofas de variedad ‘Blanca Tudela; 8.000.000 de kilos de brócoli, coliflor, romanesco, col, rábano y rúcula; 1.000.000 de kilos de patatas y 500.000 kilos de habas.
La alcachofa es, sin duda, el cultivo estrella de la localidad que va a ver mermada su producción en casi un millón de ejemplares respecto al año anterior. Las altas temperaturas, la falta de recursos hídricos, el aumento de los costes o la falta de lluvias son algunas de las causas por las que el cultivo de la alcachofa se ha visto gravemente afectado.
En el caso de las hortalizas de la familia de las crucíferas, como son la coliflor, el brócoli, el romanesco, la col, el rábano o la rúcula, han visto como ha aumentado su superficie de cultivo en 550 hectáreas, 50 más que en la campaña anterior, esperando un cultivo de un millón de ejemplares más que el año pasado. Algo que favorece además al mercado que ha experimentado un aumento de su demanda, sobre todo del brócoli, que se consume cada vez más en España y en el conjunto de la Unión Europea.