VALÈNCIA (EP). La Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio ha intensificado los trabajos para el control de plagas en los montes de la Comunitat Valenciana con el objetivo de "reducir los efectos de la sequía y el cambio climático".
El director general de Medio Natural y Animal, Raúl Mérida, ha concretado que estos trabajos de prospección de campo sobre plagas se centran en 13 especies que son consideradas como "prioritarias" por la normativa. "Nos centramos en la verificación del estado de las masas forestales en los municipios valencianos y en actuaciones en los ejemplares afectados", ha especificado.
Por otro lado, también se colabora con las autoridades portuarias con el objetivo de evitar la entrada de estos organismos a través de la frontera marítima. Los trabajos llevados a cabo durante este ejercicio por parte de las brigadas denominadas Unidades de Gestión Forestal (UGF) se han centrado en la retirada de pinos afectados por insectos perforadores de pinar, escolítidos (Tomicus, Ips), según ha informado la Generalitat en un comunicado.
Para el control de la procesionaria del pino, otro de los trabajos que han realizado las UGF ha sido el tratamiento con mochila y pulverizador hidroneumático en 232 hectáreas y más de 4.750 trampas de feromonas de esta especie, junto con la retirada de puestas de huevos en más de cinco hectáreas, así como trabajos puntuales en 250 árboles.
La sequía, según explica la Conselleria, ha sido "un factor que ha provocado el aumento de estos episodios". En cualquier caso, celebra que, "afortunadamente, las lluvias de mayo y junio han detenido el proceso en el conjunto de la Comunitat Valenciana".
Hay otras especies que, por el momento, no han tenido "una gran incidencia" en los montes, como la Xylella fastidiosa. Desde la Dirección General de Medio natural y Animal se lleva a cabo la recogida de 3.000 muestras para su análisis y, por el momento, no se ha detectado la presencia de esta plaga "más allá de casos puntuales" en pinos.
Hasta la fecha, tampoco se ha detectado la presencia del nematodo de la madera del pino (Bursaphelenchus xylophyllus) en la Comunitat Valenciana, y es "improbable" su aparición, puesto que el pino carrasco (la especie de pinar más frecuente en nuestros montes) se está "mostrando resistente a la enfermedad".
De cara a la próxima estación otoñal, con el inicio de los vuelos de reproducción de insectos como el Tomicus destruens, la Conselleria vigilará su aparición y para ello procederá a la eliminación de los árboles afectados para evitar que se reproduzcan en su interior y la nueva generación de insectos incremente los daños en el arbolado todavía vivo. Así, se trata de evitar que las plagas se sumen a los daños de la sequía.
Además, se están comenzando a planificar cortas de arbolado muerto donde su caída pueda generar daños a infraestructuras o bienes, pueda ocasionar el corte de caminos o exista riesgo para los residentes o visitantes de los espacios protegidos.