BENIDORM. El pleno de La Vila Joiosa aprobó este jueves la expropiación de unos terrenos que servirán para ejecutar un vial de la urbanización pendiente en el sector PP-17 Bulevar, colindante con el PP-27 de la partida del Torres, donde hay proyectadas 71 casas por Quadratia. Según la propuesta aprobada, se trata de una expropiación forzosa por el que el Ayuntamiento podrá ocupar las fincas a través del agente urbanizador del sector PP-27 una vez levantadas las actas correspondientes.
Aunque aún tienen que presentar la relación correcta de todo el proyecto de expropiación, que actualice, amplíe y verifique el entregado en junio del año pasado, sí que está claro el número de propietarios que están afectados por esta decisión, entre las que se encuentra la propia Sareb, la Sociedad de Garantía Recíproca de la Comunitat Valenciana, Durba 2000 SL, Prom 95, Sertorium 71 SL o Promomar Valencia SL.
Al parecer, se trataría de una serie de parcelas por los que se les tendría que compensar con unos 14.000 euros o con otros terrenos del mismo uso en la ciudad, atendiendo al documento presentado en junio del año pasado.
Relacionado con esta zona, el pleno también aprobó rechazar el recurso de Costa Inurban que pedía que el cambio de agente urbanizador en el sector PP-27 tuviera todas las garantías para que se ejecutara su futuro, algo que rechazaron porque según el concejal de Urbanismo, Jaime Ramis, ya se contemplaba en el acuerdo plenario que había recurrido la mercantil.
Además de la expropiación de estos terrenos, el equipo de Gobierno de la Vila Joiosa y Compromís, con el voto en contra del Partido Popular y la abstención de Ciudadanos, aprobaron la cesión a la Generalitat del uso del inmueble de la calle Juan Tonda Aragonés donde su ubicarán los Juzgados del partido judicial de la Vila Joiosa. La cesión se realiza por un periodo de 10 años y será la Conselleria de Justicia la que corra con todos los gastos, tal y como informaron desde el Ayuntamiento.
De esta manera, se accede a la petición realizada recientemente por la Conselleria para desvincular esta cesión de otra incluida en el convenio, por la que la Generalitat debe transferir de forma gratuita al Ayuntamiento el inmueble de la calle Constitución, donde están actualmente los Juzgados. La intención, al tramitar ambos procesos por separado, es otorgar más agilidad al proceso, ya que se está licitando ya el proyecto de acondicionamiento de la futura sede judicial y el espacio debe estar disponible lo antes posible.
Por otro lado, el Pleno del Ayuntamiento de la Vila también ha dado luz verde al inicio de los trámites necesarios para peatonalizar un tramo de la calle Colon, desde Barranquet a Canalejas, así como la calle Canalejas. Según explicaron, la moción está sustentada en un informe de la Policía Local que es favorable a ambas actuaciones y queda supeditada a un acuerdo con Pavapark, la empresa que gestiona el aparcamiento regulado de la Vila.
El objetivo es permutar las plazas de zona azul que se suprimirán en la calle Colón por otras que se crearán en diversas calles colindantes donde, hasta ahora, no había estacionamiento regulado. La propuesta ha salido adelante con los votos a favor del equipo de Gobierno y Compromís.
Esto despertó las críticas del PP, en la oposición, quienes denunciaron que se había tomado esta decisión sin consultarla con los vecinos. El portavoz popular, Jaime Lloret, tildó la propuesta de "ocurrencia", acusando a los que han aprobado cerrar las calles del centro de La Vila de hacerlo sin contar con el visto bueno de asociaciones de comerciantes como AVEA o de los vecinos.
Jaime Lloret afirmó que “el PP no está en contra de peatonalizar calles, de hecho fuimos nosotros quienes peatonalizamos la calle Colón los fines de semana, pero la postura razonable es esperar a que termine el estudio de movilidad sostenible y decidir en función de informes técnicos, no en base a decisiones políticas sin fundamento y caprichosas”.
Por su parte, el alcalde de La Vila, Andreu Verdú, explicó que “las ciudades modernas piensan, sobre todo, en el bienestar de sus habitantes y precisamente por ello incrementan la peatonalización de sus calles. De hecho, tenemos buenos ejemplos próximos, en el caso de ciudades vecinas”.