LA VILA JOIOSA. La corporación del Ayuntamiento de la Vila Joiosa se ha puesto de acuerdo en un asunto: cambiar el escudo del municipio. Según ha explicado el propio Consistorio, llevarán al próximo pleno una propuesta en la que tratarán de ajustar a la normativa valenciana la imagen de la localidad. La modificación principal consiste en cambiar la corona cerrada por la corona real abierta de Aragón y València. Además, la sesión debatirá sobre la solicitud de oficializar la senyera municipal y la creación de un emblema municipal basado en el sello de la justicia, "la máxima autoridad municipal en época foral".
Para empezar, en cuanto a lo relacionado con el escudo, desde el Ayuntamiento explican que se hace en base al decreto 72/2015, de 15 de mayo, del Consell. Este regula los símbolos, tratamientos y honores de las entidades locales de la Comunitat Valenciana. El actual escudo del municipio es oficial desde el 9 de diciembre de 1976 después de que se publicara en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Sin embargo, ya iba con una modificación que no gustó a los expertos como Pere Maria Orts i Bosch.
Tal y como recuerdan desde el Consistorio, el escudo presentaba un diferencia respecto al que venía representando al Ayuntamiento desde mediados del siglo XIX: el cambio de coronas, de abierta, a cerrada. A pesar de las advertencias del propio Pere Maria Orts i Bosch, que en una carta datada el 7 de mayo de 1973 y dirigida al alcalde de la Vila, Jerónimo Romà, informaba que en todo caso se tendría que emplear la corona real de Aragón y València.
Escudo actual.Sin embargo, se hizo caso omiso y se llegó a aprobar. "Cuatro años después, cuando se constituyó el primer ayuntamiento democrático después del franquismo, el ayuntamiento de entonces, de la mano del concejal de Cultura, que era Felipe Ramis, volvió a abrir el expediente dirigiéndose a las administraciones competentes para proceder al cambio de corona tal como sugirió Pere Maria Orts i Bosch, pero el cambió nunca se materializó", explican en su moción.
Ahora, 42 años después, retoman este acuerdo que sigue en el punto de partida, pero su tramitación está más especializada desde la aprobación del Estatuto de Autonomía en 1982, según mencionan desde el Ayuntamiento en un comunicado. En la actualidad, la Comunitat Valenciana ostenta las competencias en materia de heráldica municipal, con una normativa a seguir en dicha cuestión, y con un órgano consultivo constituido para ello: el Consejo Técnico de Heráldica y Vexilología.
"El deseo de la Corporación hubiese sido recuperar el escudo original anterior a la rehabilitación del 74 pero la normativa es clara y han de mantenerse los elementos heráldicos adecuando la corona a la abierta de Aragón”, explica el alcalde de la Vila Joiosa, Andreu Verdú. En la actualidad, se muestra con la corona cerrada. La diferencia entre unas y otras es que la abierta carece de diademas y orbe cruzado.
Según el decreto apuntado (artículo 16.2) en los escudos municipales “se utilizará por timbre la corona real abierta de acuerdo con la tradición valenciana”. También, durante este tiempo, distintas investigaciones de tipo histórico han dado a conocer qué era el sello municipal de la Vila Joiosa en época foral, en concreto durante el tiempo en que tuvo el carácter de villa real (1443-1708).
En base a la normativa del Consell, y a las investigaciones históricas realizadas, el gobierno local espera que el bloque plenario dé su aprobación al inicio del expediente de modificación del escudo municipal de la Vila Joiosa. Junto a ello, también se debatirá sobre la adopción de la bandera municipal utilizada desde 1979, para adecuarlos al Decreto 72/2015 de la Generalitat; y hacer emblema municipal del escudo cuadrado apoyado sobre uno de sus ángulos con cuatro palos rojos sobre fondo dorado en los dos tercios superiores, y tres olas de azur (azul oscuro en heráldica) en campo de plata en el tercio inferior con todas sus prerrogativas, basado en el sello de justicia. Una vez aprobada en Pleno, la propuesta de modificación se pondrá en exposición pública durante el tiempo que recoge la ley.
