Cebrián, durante su visita a la depuradora de Pilar de la Horadada en 2017. Foto: GVAALICANTE. La que será la mayor planta de compostaje de lodos de la provincia de Alicante, en la localidad de Pilar de la Horadada, empieza a cobrar forma. La Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (EPSAR) de la Comunitat Valenciana, dependiente de la Conselleria de Agricultura y Medio Ambiente, ha adjudicado a la UTE formada por Aquambiente y Pavasal la construcción y explotación durante el periodo de garantía de la planta, que la consellera Elena Cebrián anunció en 2017 durante una visita a la depuradora de la localidad.
Según la resolución de adjudicación, la oferta de Aquambiente y Pavasal se ha impuesto a otras siete (algunas de UTE, otras de empresas individuales) que llegaron a la EPSAR, gracias a la combinación de su puntuación en la oferta técnica (40 puntos) y la económica: 9 millones de euros, impuestos incluidos. Una rebaja del 15% respecto al precio de licitación del proyecto, que era de 10,4. El importe adjudicado incluye tanto la redacción del proyecto y su ejecución como la explotación de la planta una vez terminada, durante el periodo de garantía (los dos primeros años de funcionamiento).
Fuentes conocedoras del proyecto destacan que será una instalación "muy potente en el plano de la sostenibilidad ambiental". La nueva planta tendrá una capacidad de tratamiento de 20.000 toneladas al año de lodos, provenientes de las depuradoras de Pilar de la Horadada, Torrevieja, Orihuela Costa y San Miguel de Salinas. La instalación estará dotada de un sistema de desodorización eficaz, evitando la propagación de olores en las proximidades, según las mismas fuentes.
La nueva instalación utilizará como material estructurante 9.000 toneladas al año de restos de poda urbanos de diferentes municipios de la provincia de Alicante, que junto con los lodos, ricos en materia orgánica y nutrientes, producirá un compost de elevada calidad para aplicación agrícola, jardinería, horticultura, forestales y en parques municipales. De esta forma se dota a la Vega Baja del Segura de una instalación, inexistente hasta la fecha, que potencia la economía circular del entorno mediante la valorización de los fangos procedentes de las depuradoras y podas municipales.
La UTE une a dos empresas de la Comunitat Valenciana que son una referencia en sus respectivos sectores. La constructora valenciana Pavasal, una de las grandes empresas del sector de la obra pública en la región, y la firma madrileña Aquambiente, perteneciente al grupo Suez del que también forma parte la alicantina Hidraqua, responsable del ciclo integral del agua en más de 90 municipios de la Comunitat y que forma parte de empresas mixtas como Aguas de Alicante, Aigües d'Elx o Agamed.
