ALICANTE. En contra de lo previsto, la Roma y el Elche no hicieron este miércoles oficial el traspaso de Gonzalo Villar.
El mediocentro superó el pertinente reconocimiento médico pero la operación finalmente no se oficializó, aunque todo apunta a que lo anterior se producirá a lo largo de la mañana de este jueves.
Al parecer, la Roma quiso aprovechar que negociaba con el Valencia la cesión hasta final de temporada del lateral Alessandro Florenzi para tratar de cobrarse el precio de la misma de los cuatro millones que le corresponden al club che por el traspaso de Gonzalo. El problema es que es el Elche y no el Valencia el titular de los derechos federativos del futbolista por lo que es al primero al que la Roma ha de abonar la cantidad pactada (cinco millones). Una vez los perciba, el club franjiverde contará con un plazo de 15 días naturales para transferirle el 80% de la suma al Valencia (ese es el porcentaje con que cuenta de los derechos económicos del futbolistas), tal y como pactaron las partes en su momento.
El pago de la Roma se realizará vía Liga de Fútbol Profesional (LFP), algo que aligerará otros trámites ante esta como el alta de Dani Escriche.
La operación le permitirá al Elche cumplir con sus obligaciones ante la LFP, concretamente con los 700.000 euros presupuestados en venta de jugadores para la segunda mitad del curso. Así, ampliará su límite salarial de entrada en 300.000 euros, pero al final en algo más de 500.000 porque al citado superávit de 300.000 euros (entre lo presupuestado y lo ingresado) habrá que sumarle otros 110.000 que le corresponde percibir al club franjiverde en concepto de indemnización con base al mecanismo de solidaridad y los 100.000 de margen salarial que deja Gonzalo con su salida a estas alturas de curso.