decisión unánime 

La plantilla del servicio de Residuos Sólidos de Orihuela anuncia una huelga en abril

12/03/2019 - 

ORIHUELA. La plantilla de Residuos Sólidos Urbanos y Limpieza Viaria del Ayuntamiento de Orihuela decidieron ayer, por unanimidad, ir a una huelga. La protesta, que han calificado como inminente se iniciará en abril. El motivo, según esgrimen los convocantes es que el gobierno de Orihuela ha "desoído desde hace tiempo la mayor parte de sus peticiones". 

Y es que, afirman, hay varias denuncias ante la Inspección de Trabajo y protestan por, dicen, la insalubridad y deficiencias que tienen las instalaciones, las malas condiciones de los vehículos y la falta de equipo de protección individual, tanto en el lugar de trabajo denominado Campa como en Orihuela Costa.

Lo que exigen pues, es una mejora de sus condiciones de trabajo, después de que las últimas reuniones con el equipo de gobierno no surtieran efecto ni se haya podido llegar a ningún acuerdo. 


Desde Cambiemos Orihuela mostraron su apoyo "al grueso de las reivindicaciones que, durante estos años, vienen realizando desde la plantilla". Y añadieron que las explicaciones desde el equipo de gobierno, que no pueden dotar de mejores medios al servicio "por la herencia recibida" durante mandatos anteriores, no puede ser excusa. 

Temen desde la agrupación, que el hecho de no dotar de medios ni más presupuesto quiera servir de pretexto para una reprivatización de un servicio que fue municipalizado en el mandato en el que el exalcalde Monserrate Guillén. El equipo de gobierno, entonces formado por Los Verdes y PSOE tomó la decisión de gestionar directamente los residuos tras el escándalo de gestiones anteriores que entre otras, abrió la puerta a las investigaciones de la trama Brugal, ahora en juicio

Entre sus peticiones, la plantilla denuncia que el personal lleva mucho tiempo sin aseos susceptibles de uso, sin luz y sin agua, ni local habilitado para el barrido, donde aseguran que sus trabajadores están confinados en dos barracones sin luz. 

El desagüe que tienen las dos letrinas disponibles desemboca a escasos tres metros de la entrada a los barracones. Tampoco hay un punto de descarga para las barredoras, por lo que se ven en la obligación de tirar la basura aspirada al suelo en el recinto de trabajo para posteriormente echarlo a contenedores.

Además, los vehículos, aseguran, son insuficientes y se encuentran en mal estado, con averías que podrían conllevar riesgo para el personal como para terceras personas. Al haber más rutas de recogida de basura que vehículos, la plantilla se ve obligada en la mayoría de las ocasiones a no dar descanso al vehículo y ni siquiera tener tiempo de poder revisar los elementos de seguridad del mismo, por lo que los vehículos están siempre en el taller.

A todo esto se añade, la falta de indumentaria, la ropa de trabajo, así como complementos esenciales para la realización del trabajo habitual  como son guantes, mascarillas con sistemas de seguridad y más equipamiento.

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