Entrada al Ayuntamiento / RAFA MOLINAELCHE. La Junta de Gobierno del pasado viernes aprobó el Plan de Tesorería del Ayuntamiento, tal y como obliga la Ley de Estabilidad Presupuestaria que establece la información relativa al pago a los proveedores en cumplimiento de la normativa de morosidad. Este señala que el periodo de medio de pago a proveedores es de 23 días, pero en otros aspectos, también señala que a 31 de diciembre de 2021 se estima que el Ayuntamiento cuente con un saldo en sus arcas de 15 millones de euros. A 31 de diciembre de 2019 eran 33.
Actualmente esa cifra es de unos 20 millones de euros, 13 menos que los que había a finales de 2019. ¿Por qué? Además de una pandemia de por medio, durante 2020 el bipartito ha adjudicado el nuevo servicio de limpieza, que supondrá 28,1 millones de euros el primer año. También ha repartido ayudas para la covid-19, para lo que modificó el presupuesto para destinar más de 5 millones de euros —aunque parte del dinero no se agotó y se aprovechó para pagar 800.000 euros de horas extras de la policía por la pandemia—, y, sobre todo, ha tenido que ir pagando las Inversiones Financieramente Sostenibles.
No obstante, la edil de Gestión Tributaria, Patricia Macià, apunta que es una previsión para final de 2021 y que sigue siendo una cantidad holgada. "Puede que recibamos más ayudas, o más dinero del Estado. O que amorticemos más deuda de lo previsto". Son en cualquier caso cifras que se van actualizando trimestralmente y que dependen de los ingresos y los gastos municipales. Y lo que más ha restado a esos ahorros municipales han sido las IFS, ya que se han comprometido 17,5 millones de euros de unas partidas presupuestarias que se financian con fondos propios. También hay otros factores aunque de menor impacto como la exención de tasas de mesas y sillas en terrazas, que supone alrededor de un millón menos de ingresos.
Por otra parte, Macià advierte que todo variará dependiendo de lo que suceda, teniendo en cuenta que en un contexto de pandemia, todo es más imprevisible y puede ser que se reciba dinero de otra administraciones o que se tenga que gastar más si la situación lo requiere. Y añade que "por ejemplo este informe no ha contemplado medio millón de euros que recibiremos de la Diputación para servicios sociales porque todavía no se ha aprobado". También la entidad provincial aún no ha ingresado su parte correspondiente al Plan Paréntesis. Por eso matiza que puede ser que a final de año el Consistorio acabe teniendo más de 15 millones en las entidades bancarias.
Así, queda todo el año para ver cuál será el cash final en las arcas municipales. De momento, a pesar de la pandemia, se prevé una recaudación mayor a través de impuestos y tasas: 85 millones de impuestos directos, 7 de indirectos y 21 por tasas. Se prevé de hecho más recaudación en el IBI y el IAE.
