DÉNIA. Las cifras en 2023 continúan reflejando el efecto positivo de la última reforma laboral y la resistencia de la economía en la Marina Alta, según los datos del Observatori de Creama y Pacte'Ma. La comarca crea cerca de 1.800 nuevos empleos en 2023 a pesar de la inflación y las tensiones geopolíticas y se convierte, además, en el tercer año consecutivo en el que crece el empleo después del fuerte impacto que la pandemia tuvo sobre el mercado laboral. De hecho, la economía de la Marina Alta cuenta hoy con 7.298 empleados más que en diciembre de 2019 y casi un 60% de los nuevos empleos lo son con contrato indefinido.
Dos años después de la reforma laboral impulsada por el gobierno, los datos del cierre del año 2023 arrojan un balance positivo del empleo, con más de 61.000 afiliados a la Seguridad Social y un número total de demandantes de empleo en diciembre con niveles más bajos desde 2007, antes de que estallara la crisis financiera. Aunque el cambio de modelo que se inició con la reforma de 2021 se mantiene, las cifras apuntan a una ralentización en el ritmo de creación de empleo, que previsiblemente se agudizará en 2024, como consecuencia de la desaceleración del crecimiento.
La cifra de demandantes de empleo ha crecido en este último mes en 78 personas, encadenando 4 meses consecutivos de aumentos, cuando lo habitual en meses de diciembre previos a la crisis pandémica, era hablar de descensos de demandantes de empleo en más de 230 personas en promedio (de 2012 a 2019). Además, el paro pese a que siguió descendiendo en todo 2023, este lo hizo a menor velocidad que un año antes; el año pasado se firmaron 3.668 contratos indefinidos menos que en 2022 y el colectivo de mujeres desempleadas, aunque ha aumentado en menor medida al de los hombres, sigue siendo el mayoritario entre quienes buscan trabajo. Además, aunque el peso de los contratos indefinidos ha crecido en términos generales y se ha estabilizado a lo largo del ejercicio en torno al 64%, se sigue apreciando el carácter estacional del mercado laboral de la Marina Alta, un sesgo propio de una economía donde el sector servicios sigue ganando peso.
Peor noticia es la bajada del número de afiliados: hay 362 menos que el mes pasado, así que en la Marina Alta hay 61.002 personas trabajando —igualmente un récord en un mes de diciembre—, aunque supera lo habitual en un mes de cierre de año; en 2014-19 el promedio para diciembre arroja un descenso de 197 afiliados. Menor preocupación ocupa su variación anual, su crecimiento interanual ha sido del 3,03%.