ALICANTE. La luz que veía Felipe Alfonso al final del túnel era la del tren que venía de frente. No cabe pensar otra cosa cuando el Hércules anuncia que al lateral vallisoletano se le ha encontrado una hernia en la zona inguinal izquierda que estaría detrás de las molestias que sufre en el pubis.
El futbolista, inédito desde la primera jornada de Liga, tendrá que pasar por el quirófano para la que los especialistas definen como una pequeña intervención consistente en la colocación de una rejilla y que no debería impedirle volver a correr en diez días.
El club blanquiazul, por su parte, amplía hasta los 15 días el periodo de baja, añadiendo que a partir de ese momento se reincorporará paulatinamente a los entrenamientos.
Esperemos que este último episodio sea el principio de fin de los problemas de salud de un futbolista cuya ausencia ha supuesto un serio problema tanto a Lluís Planagumà como a Jesús Muñoz. El club, que primero manifestó que esperaba que el futbolista tuviera el alta médica para recibir al Barça B, este mismo martes hablaba de la semana del Cornellà (es decir, la próxima) o para recibir al Lleida. Ahora ya sabemos por qué.